Hoy por hoy, cada película de Marvel es una absoluta locura informativa: sabemos hasta el último detalle del Alto Evolucionador antes siquiera de que salga el tráiler de Guardianes de la Galaxia vol.3, hemos juzgado The Marvels después de ver dos minutos, ya sabemos todo lo que vendrá de aquí a los próximos tres o cuatro años. Pero hubo una época en la que Marvel estaba dando pequeños pasitos sin saber si su idea loca de crear un universo cohesionado tendría éxito o no.
¿Ha oído hablar de la Iniciativa Vengadores?
Iron Man 2 es solo la tercera película del MCU tras Iron Man y El Increíble Hulk, allá cuando había solo una cinta del estudio al año. Y en esa cinta es donde aquella “Iniciativa Vengadores” que nos sorprendió en la postcréditos de la primera parte empezaba a hacerse realidad… en un detalle del fondo en una conversación entre Nick Fury y Tony Stark.
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En ese mapa, que marca todas las incursiones superheroicas que SHIELD había notado hasta ese momento, podemos ver las dos que ya conocíamos (Hulk en Nueva York e Iron Man en Malibú), pero hay otros detalles interesantes, como una en medio de África (Black Panther llegaría en 2018, una década después), en medio del océano (Namor aparecería en Black Panther: Wakanda Forever, en 2022), Nuevo México (Thor, que debutaría en la siguiente película del estudio), Groenlandia (probablemente Capitán América, que demostraría lo que vale en 2011) y hasta Noruega (aún una incógnita).
No es el único guiño que hace la película al futuro del MCU: en un momento dado, Tony saca su teléfono y se puede ver una app de los Illuminati, un grupo al que no veremos hasta mucho tiempo después en una realidad alternativa de Doctor Strange en el multiverso de la locura. ¿Quién dijo que no estaba todo ya planeado desde el principio?
