Christopher Nolan es sinónimo de sorpresa. El director lleva desde finales de los años 90 dirigiendo filmes en los que siempre hay un giro de guion esperando en su desenlace. Aunque el cineasta ha tratado otro tipo de historias en las que se aleja un poco de a lo que tiene acostumbrados a sus fans -hablamos de la Trilogía de El Caballero Oscuro y de la histórica Dunkerque-, Nolan siempre busca mantener al espectador en vilo y dejarle con la boca abierta. El director es experto en volarte la cabeza, pero hay uno que es su mejor giro de guion.
En el año 2000, Nolan estrenó su segunda película. El cineasta debutó detrás de las cámaras en 1998 con Following, pero el filme que dejaría en el espectador la esencia de su cine fue Memento.
Protagonizada por Guy Pearce, Carrie Anne-Moss, Joe Pantoliano y Jorja Fox; Memento sigue a un hombre llamado Leonardo que sufre pérdida de memoria a corto plazo y busca al asesino de su esposa. Para no perderse en el avance de su investigación, se va dejando pistas a sí mismo en forma de mensajes, tatuajes y fotografías.
La gente está marchándose de esta película "totalmente devastada": Es una historial real, pero su final no está dejando a nadie indiferenteMemento está narrada a través de dos líneas de tiempo. Una de ellas se cuenta en blanco y negro y la otra en color. Cuando ambas convergen, Leonard debe enfrentarse a la verdad detrás del secreto que ha estado reprimiendo. No queremos contarte más por si no has visto la película y quieres disfrutarla en todo su esplendor.
Memento fue lo que le dio a Nolan la fama y, aunque el cineasta ha seguido volando la cabeza a los espectadores con sus siguientes proyectos -Insomnio, El truco final, Origen, Interstellar y Tenet-, no hay nada como la primera vez. Además, a diferencia de sus últimos proyectos, el cineasta construyó en Memento una historia sencilla, más asentada en la realidad y sin una presencia tan potente de la fantasía y la ciencia ficción.
Tras Tenet, Nolan vuelve al drama histórico -como ya hizo con Dunkerque- con Oppenheimer. La película, protagonizada por Cillian Murphy, llega a los cines el 20 de julio y cuenta la historia del padre de la bomba atómica Robert Oppenheimer. Sobre estas líneas, no te pierdas el tráiler.
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