No es lo habitual, pero la Federación Internacional de Fútbol Asociación, a la que comúnmente nos referimos como FIFA, financió una película casi al 90% en 2014. Se llamaba United Passions y lo más posible es que no te suene, puesto que apenas se estrenó en unos cuantos países a consecuencia de toda la polémica que se acumuló a su alrededor. La película, dirigida por el francés Frédéric Auburtin, contaba con algunas populares estrellas en su reparto, como Gérard Depardieu, Sam Neill y Tim Roth, pero si nos acordamos de ella a día de hoy no es precisamente por su buen resultado. El filme es considerado uno de los peores de todos los tiempos, sus pérdidas fueron millonarias y, lo peor de todo es que la única razón por la que es famosa es por haber causado estupor e indignación entre la sociedad.
Presentada como un drama dedicado a narrar la historia de la principal institución futbolística del mundo, United Passions comienza en 1905 con el nacimiento de la FIFA bajo el mandato de su primer Presidente, Robert Guèrin, y continúa con el resto de sus etapas, principalmente las de sus tres presidentes más conocidos: Jules Rimet (Depardieu), Joao Havelange (Neill) y Sepp Blatter (Roth). En ella, se plasmaba a la organización como una institución con una historia repleta de logros, a la que el fútbol como deporte se lo debe prácticamente todo.
United Passions fue tachada de propaganda desde el primer momento, pero la indignación ante tal atrevimiento alcanzó cotas estratosféricas por el inoportuno momento en el que fue estrenada: En medio del mayor escándalo de corrupción que jamás haya afectado al organismo rector del fútbol en todo el mundo. Ese mismo año, en 2015, los fiscales federales de los Estados Unidos revelaron diversos casos de corrupción y soborno dentro de diferentes instituciones de la FIFA, así que la imagen heroica y halagüeña que presentaba la película no sentó precisamente bien.
Presentada en el Festival de Cine de Cannes, la película no se estrenó en muchas salas de cine, pero sí tuvo estreno comercial en Estados Unidos, donde fue un absoluto fracaso. La FIFA se había gastado 32 millones de dólares en la financiación de la película, pero el filme, que fue considerado terrible a todos los niveles, apenas recaudó 900 dólares en su primer fin de semana en taquilla. Su recaudación total no mejoraría demasiado, alcanzando únicamente 169.000 dólares.
"Puro excremento cinematográfico"
Descrita por The Guardian como un "puro excremento cinematográfico", United Passions no cuenta con ningún elogio. Tanto la prensa especializada como el público consideraron que, al no abordar el asunto en su guion, la película era tan solo burda propaganda por parte de una organización que se sospechaba corrupta con el objetivo de blanquear su imagen, pero es que, además, la consideraron pésima. No te extrañará saber que tiene un 0% de comentarios positivos en la web de críticas Rotten Tomatoes.
¿Por qué Auburti, Roth, Depardieu y Neill, entre otros, se prestaron a todo aquello? "Me disculpo por no haber cuestionado al director, no haber cuestionado el guion", admitió Roth al medio alemán Die Welt en su día, aunque a menudo se ha mostrado reacio a hablar de este tema. "Este es un papel que hará que mi padre se remueva en su tumba", añadió, pero el actor necesitaba el dinero en aquel momento y, sencillamente, tiró para delante. Por su parte, el cineasta explicaría a The Hollywood Reporter que, aunque su idea inicial era hacer una cinta con un toque a lo Michael Moore, finalmente la balanza se inclinó más hacia lo que quería la FIFA: "Ahora soy un tipo de propaganda que hace películas para gente corrupta", se lamentó en declaraciones a la famosa publicación.
Y solo en el caso de que te lo estés preguntando: No, United Passions no está disponible en ninguna plataforma de 'streaming' actualmente.