Uno de los papeles más recordados de Winona Ryder es el de Mina Harker en Drácula de Bram Stoker. La adaptación cinematográfica de la famosa novela contó con Francis Ford Coppola como director y con Keanu Reeves, Gary Oldman, Richard E. Grant y Anthony Hopkins en su reparto. Para conseguir que Ryder llorase en una escena, Coppola pidió a los intérpretes masculinos que le dijeran cosas horribles a la actriz, algo que no funcionó.
Esta anécdota la contó primero Ryder en Sunday Times y se armó un poco de lío. Según la actriz, Coppola pidió a los actores que había en el set de la cinta que la insultasen mientras rodaba una escena para conseguir una respuesta emocional concreta. Pero Reeves, que interpretó a Jonathan Harker y Anthony Hopkins, que dio vida a Van Helsing, se negaron.
La escena en cuestión es en la que Mina está en la cama con Drácula y él se convierte en un montón de ratas. Detrás de cámara, como relató Ryder, Coppola le gritaba: "¡Tú, zorra! ¡Zorra!", para que la intérprete se pusiese a llorar. "Para ponerlo en contexto, se suponía que tenía que llorar", cuenta Ryder.
"Literalmente, Richard E. Grant, Anthony Hopkins, Keanu… Francis estaba intentando que todos me gritasen cosas que me hiciesen llorar. Pero Keanu no lo hizo. Anthony no lo hizo… A medida que iba ocurriendo, pensaba: 'No funciona'. Pensaba: '¿De verdad?'. De alguna forma provocó lo opuesto”, añade.
Es uno de los directores más prestigiosos de la historia, pero un ataque de nervios, un conflicto de agenda y un asesinato provocaron la peor decisión de su carreraTras estas declaraciones, Coppola dio su versión y afirmó que el suceso no había sido tal y como Ryder lo había relatado. "Aunque creo que Winona es una actriz maravillosa, el incidente que describió no ocurrió así y gritar o abusar de gente no es algo que hago como persona y como director", relató el cineasta en un comunicado enviado a People.
"En esta situación, que recuerdo con claridad, pedí a Gary Oldman, en personaje como Drácula, susurrarle palabras improvisadas y a los otros personajes, haciéndolos tan horribles y malvados como pudo. No sé lo que se dijo, pero la improvisación es una práctica cinematográfica común", indica.
A su vez, Ryder, a través de un representante, afirmó que estaba de acuerdo con lo que decía Coppola, pero destacó que lo que le dijeron fueron "cosas horribles":
Winona y Francis concuerdan y su recuerdo es correcto. Pidió a los actores, como sus personajes, decirle cosas horribles como una técnica para ayudarla a llorar en la escena. Aunque esa técnica no funcionó, le quiere y le respeta y considera que es un gran privilegio haber trabajado con él
El rodaje de Drácula dejó algún que otro momento para el recuerdo. Algunos mucho más amables que el de Ryder. Por ejemplo, la actriz contó que cree que es posible que ella y Reeves estén casados a ojos de la iglesia rumana. “Realmente nos casamos en Drácula. No, lo juro por Dios, creo que estamos casados en la vida real. En esa escena, Francis usó un cura rumano real”, afirmó.
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