Quizás el cine que apetezca ahora mismo no sea el que aborda cuestiones como el calor o la sequía. Pero sí creo que es, precisamente, el más oportuno. ¿Qué deriva llevamos en esta carrera que parece no tener freno, en el que las temperaturas cada vez son más altas y las lluvias más escasas?
El cine, de toda la vida, ha sido una de las mejores herramientas para mover conciencias. Y no solo a través del cine social más puro, en la onda de un Ken Loach o los hermanos Dardenne, sino desde otros géneros tan dispares como el terror, la ciencia ficción o el thriller.
No mires al sol
En este último nos vamos a detener para recomendaros una curiosa película que tenéis disponible en AMC a través de Prime Video. Su nombre es Blind Sun y está dirigida por la directora libanesa Joyce A. Nashawati. En esta singular propuesta nos trasladamos a una Grecia asolada por el calor y la sequía, más concretamente una villa de lujo en el que el agua escasea y la violencia se contiene en una olla a presión a punto de estallar. Ashraf, el vigilante de la villa mientras los dueños están ausentes, es detenido en un control de inmigración. A partir de aquí se desencadenan unos hechos completamente imprevisibles.
Protagonizada por Ziad Bakri, Louis-Do de Lencquesaing y Gwendoline Hamon, Blind Sun ha sido calificada por algunos espectadores como una cinta “surrealista, hermosa, paranoica y nauseabunda”. La atmósfera de la película, al parecer, está increíblemente bien conseguida y transmite todo el calor, el sofoco y la angustia del personaje principal. La pesadilla de Ashraf comienza con ese encontronazo con el policía: a pesar de dejarle pasar por el control, el oficial se queda con su permiso de residencia, obligando a Ashraf a tener que conseguirlo posteriormente. Esta actividad se le complicará sobremanera: se añade la circunstancia de que en la ciudad comienzan los cortes de agua, la ola de calor cada vez es más sofocante. Es entonces, cuando Ashraf comenzará a perder la razón. ¿O no?
Blind Sun es, seguramente, un trago espeso y difícil para esta época del año. En AMC Prime Video tenemos un revulsivo para, quién sabe, tomarnos un poco más en serio esto del cambio climático. Asegúrate de tomar algo fresco mientras discurren sus 88 minutos de metraje: sin duda, lo vas a necesitar.