Hace algunos años, concretamente desde 2019, que pasamos página con la más reciente trilogía de la franquicia Star Wars, pero, aunque ahora nuestras esperanzas y expectativas estén depositadas sobre los nuevos planes de Disney para seguir ampliando el universo galáctico más importante de la industria cinematográfica, los Episodios VII, VIII y IX siguen estando muy presentes. Aún con algunos disgustos de por medio, las nuevas películas pusieron el broche de oro a la apodada Saga Skywalker y, aunque su eje central fueron las historias de los nuevos personajes introducidos, sirvieron para poner el broche de oro a las tramas de Han Solo (Harrison Ford), Leia Organa (Carrie Fisher) y, por supuesto, también a la de Luke Skywalker (Mark Hamill).
Durante el tiempo en que la nueva trilogía se mantuvo con vida -El despertar de la fuerza se estreno en 2015, Los últimos Jedi en 2017 y El ascenso Skywalker en 2019-, la expectación sobre todas ellas fue total y absoluta entre los fans. Descubrir el verdadero origen de Rey (Daisy Ridley) y su relación con la Fuerza fue el principal misterio y, hasta que por fin descubrimos sus orígenes, se plantearon múltiples teorías.
No fueron las únicas y, de hecho, en algunos casos llegamos a pasarnos.
La mejor prueba de que a veces dejamos volar la imaginación por encima de los creadores de las historias que nos vuelven locos es la del misterioso niño de la escoba que aparecía en el final de Star Wars: Los últimos Jedi. Un niño sin identificar que ayudaba a Finn (John Boyega) y Rose (Kelly Marie Tran) a escapar del casino mediante el uso de la Fuerza y que, además, llevaba un anillo de la Resistencia.
El desconocido personaje del Episodio VIII consiguió captar la atención de gran parte del 'fandom' y se generaron muchos comentarios sobre quién era realmente y cuál sería su importancia en la trilogía, que todavía tenía por delante una tercera película y muchos interrogantes por resolver. Sin embargo, la respuesta estaba ahí desde el principio: El niño se llamaba Temiri Blagg, era un mozo de establo de Canto Bight sensible a la Fuerza de Cantonica y huérfano de padres, puesto que le habían abandonado en el casino como pago de sus deudas.
La información se publicaba el el libro Star Wars: Los Últimos Jedi: Diccionario Visual que fue publicado exactamente el mismo día en que se estrenaba la película.
En una entrevista con Jamie Stangroom en 2020, Temirlan Blaev, el actor que encarnó al pequeño, reconoció que incluso él mismo pensó que tendría más importancia: "Creo que fue inesperado, pero la reacción de todo el mundo dijo: "¿Quién es este chico? ¿Qué podría significar esto? ¿Es él el próximo jedi? ¿Quién es?". Creo que eso generó muchos comentarios sobre quién era mi personaje realmente. Después de leer el guion, como que entendí que era sensible a la Fuerza. Pensé que eso podía significar algo para mi personaje". No fue así.
Ahora, la franquicia tiene sus ojos puestos en sus tres nuevos proyectos.La actriz, que dio vida a Rey regresa con una película ambientada 15 años después de El Ascenso de Skywalker y en la que su personaje es una maestra Jedi que abre una academia de Jedis, mientras que James Mangold y Dave Filoni también dirigirán cada uno un filme: Dawn of the Jedi sobre los orígenes de los Jedi y el amanecer de la Fuerza antes de la Antigua República; y una película aún sin título que culmine los eventos del Mandoverso.
