Hay que tener las ideas muy claras para sacar una continuación de El Exorcista. La película de William Friedkin celebra su 50 aniversario este año convertida en una piedra angular del terror cinematográfico, ¿quién querría verse expuesto a las comparaciones con esta obra maestra? Al parecer, Jason Blum y David Gordon Green, quienes han puesto toda la carne en el asador para estrenar en cines El exorcista: creyente este 6 de octubre.
Hacía tiempo que la idea de extender el universo de El Exorcista rondaba por la cabeza de Blum, pero no se atrevía a romper su misticismo. No fue hasta que la nueva entrega de Halloween tuvo éxito cuando se lo planteó en serio. "La original es, probablemente, la película de terror más icónica que jamás ha existido. Creo que nosotros dos, después de hacer Halloween, ganamos confianza para abordar algo tan trascendental", cuenta Jason Blum en una entrevista con SensaCine.
Lo cierto es que la leyenda comenzada por Friedkin ya se ha fracturado en otras ocasiones. El exorcista II: el hereje se estrenó en 1977 con Linda Blair como protagonista, a la que siguió El exorcista III en 1990. Después, ya en los 2000, vieron la luz dos precuelas: El exorcista: el comienzo (2004) y El exorcista: el comienzo - la versión prohibida (2005), una versión desechada de la primera precuela con Paul Schrader al mando que terminó consiguiendo mejores valoraciones que la cinta que se estrenó en cines. Esto tiene un tema aparte.
El caso es que Blum y Green parecen haberse tomado la nueva entrega más en serio y han indagado en las raíces de lo que convirtió a El exorcista en un evento cinematográfico.
Es el Santo Grial de las películas de terror y cambió la cara, no solo del género, sino del cine. Fue un ‘blockbuster’ en su época, así que, ¿cómo tomas lo que significó para la cultura en ese momento e intentas recrear algunas de esas amenazas?
"Mucho de lo que hablamos fue cómo lo haces identificable para una audiencia que quiere una película de terror contemporánea, donde las técnicas y los atributos han cambiado significativamente, pero también llegar a esa construcción de personajes tan lenta de la original, que creo que tiene mucho valor. Se trata de construir esos puentes e intentar mezclar esos dos tipos de elementos tan diferentes en dos tipos de audiencias muy diferentes", continúa.
Esa investigación les llevó a estudiar diferentes religiones y su aproximación a las posesiones. "La idea de que múltiples religiones pueden tener una perspectiva diferente sobre las posesiones era algo que siempre me ha interesado. Tener la belleza de la conversación y a veces el conflicto de cuando entran en el debate perspectivas religiosas y médicas cuando experimentan las entidades de los desconocido", explica el director.
El exorcista: creyente plantea nuevos retos y propone reflexiones diferentes de las que asustaron a la audiencia en 1973, pero cuenta con dos elementos clave de la original: la presencia de Ellen Burstyn 50 años después y Linda Blair como asesora para conseguir que las jovencísimas actrices pudieran llegar a los lugares tan oscuros que requería el guion. "Los dos creemos que cuando extiendes una franquicia es importante tener involucrado al equipo de la original. Hablarles sobre ello e intentar que participen", cuenta Blum, "Ya habían hablado con Ellen antes, pero no habían hecho [la película]. Ella tuvo una reunión con David y creo que encontró un alma gemela de espíritu en él. Cuando finalmente dijo que sí fue muy emocionante para nosotros dos".
El exorcista: creyente ya está en cines.