Si hay un ingrediente que tiene papeletas para triunfar en una película de terror es sin duda la existencia de un infante malvado y diabólico. Un niño pequeño aparentemente adorable e inocente que, en realidad, esconde violentos instintos asesinos tras un rostro angelical. Que los niños malvados dan auténtico pavor es algo de lo que la historia del cine nos ha dejado varios ejemplos a lo largo de los años y rápidamente se nos vienen algunas a la mente, como ¿Quién puede matar a un niño? de Chicho Ibáñez Serrador, La Huérfana, The Children o la reciente y escalofriante The Innocents que nos puso los pelos de punta el año pasado.
No obstante, que una película de terror se cimente sobre la presencia de un niño o niña diabólico no quiere decir, ni muchísimo menos, que vaya a ser buena. Y eso es lo que le pasó en el año 2009 a Expediente 39, un filme dirigido por Christian Alvart y protagonizado por un notable elenco de estrellas -Renée Zellweger, Ian McShane y Bradley Cooper- que resultó ser un desastre tanto a nivel de crítica como comercial, con apenas una recaudación de 28 millones, solo dos más del presupuesto de la película.
Expediente 39 comenzó con bastante mal pie, además, puesto que nada más comenzar el rodaje en octubre de 2006 el set de la película ardió en llamas.
Y sí, puede que no sea la mejor película de terror que existe, pero si te gusta el género y te apetece una sesión de sustos para esta noche pre-puente, una buena oportunidad para verla en abierto de la mano de la TDT esta noche a las 22.05 horas en el canal de cine Paramount, puesto que no está disponible en el catálogo de ninguna plataforma de 'streaming' y solo se ofrece mediante opciones de alquiler.
Afortunadamente, el fuego no produjo daños humanos. En el momento del accidente no había actores en el set de rodaje y nadie del equipo se vio herido de seriedad. Sin embargo, el lugar quedó destruido por completo y tuvo que ser reconstruido. Lo que ocurrió es que el incendio provocado por el equipo de efectos especiales de la película, puesto que en ella también se produce un fuego, se descontroló por completo y acabó destruyéndolo todo.
Finalmente el rodaje pudo comenzar a finales de ese mismo año, aunque la película tardaría tres años en ver la luz tras ser víctima de algunos retrasos.
En Expediente 39 Renée Zellweger encarna a Emily Jenkins, una asistente social que se enfrenta a un complicado caso: el Expediente nº39, cuyo sujeto es una niña llamada Lilith Sullivan (Jodelle Ferland) que presuntamente sufre maltrato por parte de sus padres. Tras corroborar que los progenitores de la pequeña han querido matarla, Emily decide que tiene que ayudarla y se lanza a acogerla en su casa hasta que encuentre a una familia adoptiva.
Sin embargo, la pequeña Lilith está envuelta en un gran misterio y Emily no tarda demasiado en descubrir que la niña no es tan inocente como parecía y que, quizá, sus padres tenían una razón de peso para querer eliminarla de sus vidas.
Con una puntuación de un 21% en Rotten Tomatoes, está claro que Expediente 39 no fue bien recibida por la crítica. En SensaCine le dimos 1 estrella sobre 5, con una crítica que acusa la falta de originalidad y la falta de solidez de la película: "Lo que debería dar miedo, nos provoca risa. El filme empeora a medida que avanza y el tramo final de la película -que busca desesperadamente sacar algún partido del pasado oculto de la protagonista- acaba por sumirla de lleno en la categoría de absoluto disparate".