Sin duda, a Sydney Sweeney le venía bien un papel como el que interpreta en la nueva comedia romántica de la cartelera, Cualquiera menos tú. Y es que esta jovencísima actriz está más que acostumbrada a sufrir muchísimo en pantalla. La vimos perder la cabeza (no literalmente) por culpa de relaciones extremadamente tóxicas en la serie Euphoria (que podemos ver en HBO Max), ser interrogada hasta la extenuación en la fantástica Reality (disponible en Filmin); ser castigada por voyeur en, precisamente, The Voyeurs (en Prime Video)...
Ahora, por fin, Sydney Sweeney se divierte y hasta sonríe. Es la protagonista indiscutible de los estrenos comerciales del fin de semana que, tranquilos, llegará tarde o temprano. Se trata de Cualquiera menos tú, una cinta que, a tenor de su tráiler y de la pieza que os traemos en primicia, no puede oler más a comedia romántica clásica, de esas que han protagonizado Jennifer Aniston o Julia Roberts y lo mismo te arreglan un domingo tonto que una cita con un posible romance.
Cualquiera menos tú, que viene dirigida por Will Gluck (Con derecho a roce) cuenta la historia (y los desencuentros) de Bea y Ben, lo que podría ser a ojos de cualquier desconocido la pareja perfecta. Sin embargo, tras una primera cita modélica algo pasa… y la cosa se enfría. Sin embargo, ambos vuelven a encontrarse en una boda en Australia y, a pesar de que ambos se odian profundamente, se ven obligados por las circunstancias a simular que son pareja. Y, claro, el roce hace el cariño. Y supongo que también tiene que ver que ambos tengan el aspecto de un par de supermodelos.
El reparto de Cualquiera menos tú se completa, entre otros, con los nombres de Glen Powell (Top Gun: Maverick), que interpreta a Ben, Dermot Mulroney, todo un clásico del género (llegó a dirigir la comedia romántica Un plan para enamorarse), Michelle Hurd (Bad Hair) y Alexandra Shipp (Barbie).
Todos los amantes de las comedias románticas y parejas jóvenes y ociosas sin planes este fin de semana, ya tenéis algo que hacer. Y es que Cualquiera menos tú parece, a tenor de lo visto en su tráiler, ese clásico caramelito que no engaña ni molesta a nadie. Y es que hay ocasiones en las que vamos al cine, precisamente, solo para eso.