Cinco meses después de su estreno en cines llega a Netflix Mi soledad tiene alas, la ópera prima de Mario Casas tras haberse consolidado como uno de los actores españoles más populares de la última década. El intérprete de 37 años, ganador del Goya en 2020 por su papel en No matarás, comenzó siendo un ídolo adolescente con sus papeles en series como SMS (Sin miedo a soñar), Los hombres de Paco o El barco y, sobre todo, la saga romántica que comenzó con la película 3 metros sobre el cielo, pero, con el paso de los años, comenzó a tener un mayor reconocimiento por parte de la crítica de la mano de distintas oportunidades con algunos reconocidos cineastas españoles.
Sus trabajos a las órdenes de Álex de la Iglesia -Las brujas de Zugarramurdi, Mi gran noche y El Bar, así como otros de sus más elogiados papeles como en el thriller Contratiempo, El fotógrafo de Mauthausen, Hogar o El practicante, le dieron muchas tablas a casas y se convirtieron en su mejor escuela de aprendizaje para ir un paso más allá. Dirigir su propia película.
Un sueño que pudo hacer realidad en 2023 con el estreno de Mi soledad tiene alas, su primera película como director con su hermano Oscar Casas como protagonistas y que fue estrenada el pasado 26 de agosto en las salas de cine de toda España. Si no la viste, la película está disponible a partir de hoy, viernes 19 de enero de 2024, en el catálogo de la plataforma de 'streaming' Netflix, donde cabe esperar que viva una segunda vida repleta de éxito.
"He estado aprendiendo de muchos de mis maestros o mis profesores desde siempre", contaba en entrevista con SensaCine con motivo del estreno de la película admitiendo que lo que más le llamaba de ser director era trabajar con los actores, al fin y al cabo la profesión a la que ha dedicado su vida. "Lo que a lo mejor yo no he tenido o he vivido o sí he tenido como actor con directores es algo que yo quería proponerles a los chavales", nos contaba.
Mario Casas y la magia de la primera vez con 'Mi soledad tiene alas': "En una película de un director novel hay muchos errores, pero también inconsciencia y aciertos""El punto de partida siempre había sido Óscar", admitía Mario. "Tiempo atrás yo ya le había dicho: '¿Te imaginas que algún día consigo dirigirte, sumergirte ahí, pasar ese camino contigo?". Finalmente, aquella fantasía se hizo realidad con Mi soledad tiene alas, un drama social urbano planteado como un homenaje al cine quinqui de los años 80.
Ambientada en un barrio humilde de la periferia de Barcelona, Mi soledad tiene alas es la historia de Dan (Óscar Casas), un joven con un gran talento para la pintura que vive llevando a cabo pequeños robos y disfrutando de la noche y de la fiesta junto a sus dos amigos más cercanos, Vio (Candela González) y Reno (Farid Bechara). El regreso a casa de su padre tras un tiempo cumpliendo condena en prisión, despierta emociones en Dan que le acaban metiendo en una espiral autodestructiva.
"Es una película pequeña", admitía Casas, quien tampoco descartaba entonces volver a repetir la experiencia como actor. Un guion "sencillo" que él mismo escribió en cuarentena con la que entonces era su pareja la también actriz Deborah François y que finalmente le ha permitido cumplir un sueño.
