Es una de las películas más esperadas de 2024 y la expectación es total y absoluta por parte de público y crítica, pero para Francis Ford Coppola es mucho más que eso: Megalopolis es, dicho por él mismo, "la película de mis sueños" y por fin es una realidad desde que, hace ahora más de 40 años, comenzase a trazar la historia de un arquitecto que quiere reconstruir la ciudad de Nueva York como una utopía tras un desastre devastador y escribiese un primer guion.
El director de El Padrino, varias veces ganador del Oscar, comenzó a trabajar en Megalopolis a principios de los 80, pero entonces no estaba en su mejor momento. La brillante Apocalypse Now había puesto el broche de oro a una década marcada por los éxitos de El Padrino I y II, La Conversación y la propia cinta sobre la guerra de Vietnam, pero su siguiente película iba a desmoronarlo todo: Corazonada fue tal fracaso a nivel comercial que la productora del cineasta se acabaría declarando en bancarrota y Coppola se vería obligado a sacrificar sus planes para saldar sus deudas.
En este escenario era imposible que Megalopolis fuera una realidad, pero nunca dejó de estar en sus planes y, de hecho, en una entrevista en 2007 explicó que la razón por la que había dirigido Drácula de Bram Stoker, Jack y Legítima defensa en los 90 fue para poder saldar su deuda y ser económicamente libre para cumplir con su deseo de hacer la película de ciencia ficción distópica que tantos años llevaba en su cabeza.
La historia no ha sido fácil, pero, tras terminar el rodaje de Megalopolis en marzo del año pasado, el estreno de la esperada película está confirmada para 2024 por el propio cineasta: "Solo pasarán unos meses y saldrá", aseguró tras dar por finalizado el rodaje. "Todo lo que puedo decir es que amo a los actores que aparecen en ella. Es inusual y nunca aburrida. Aparte de eso, espera y verás".
Ahora, tanto Francis Ford Coppola como la cuenta oficial de Megalopolis en Instagram, han compartido la primera imagen:
A la imagen compartida, que puedes ver sobre estas líneas, no la acompaña ningún texto, pero en ella podemos ver el título sobre los restos de una ciudad visiblemente devastada.
Y de una ciudad devastada parte su trama principal precisamente, concretamente la de Nueva York en un futuro distópico y que un ambicioso arquitecto al que interpreta Adam Driver pretende levantar desde cero. Sin embargo, el conservador alcalde de la ciudad no ve sus planes con buenos ojos y se interpondrá en su camino. Entre ellos, una mujer: la amante del primero y la hija del segundo, interpretada por Aubrey Plaza.
Además de Driver y Plaza, completan el reparto Giancarlo Esposito, Grace VanderWaal, Shia LaBeouf y Laurence Fishburne, entre otros.
Historia de un sueño hecho realidad
Cuando por fin había saldado sus deudas, Coppola retomó sus planes en 2001, pero cuando sucedieron los ataques terroristas del 11-S en la ciudad de Nueva York, sintió que no era el momento para seguir adelante con un proyecto cimentado sobre la reconstrucción de aquella ciudad. Casi dos décadas después de haber abandonado el proyecto, Coppola decidió retomarlo en 2019 y comenzó a tantear actores para dar con el reparto perfecto.
Además, Coppola tenía tan claro que Megalopolis iba a salir adelante en esta ocasión que él mismo puso el presupuesto de su bolsillo: 120 millones de dólares reportados que, según algunos rumores, en realidad terminaron siendo unos cuantos más. En 2022 en un evento en reconocimiento a su carrera, explicó la razón:
Hay una cierta manera en que todo el mundo piensa que debería ser una película, y vas a contracorriente si tienes otra idea. La gente puede ser muy inaceptable, pero a veces la otra idea representa lo que vendrá en el futuro. Eso es digno de ser considerado
En definitiva, Francis Ford Coppola quería hacer la película de sus sueños con la libertad de hacerla tal y como la había soñado.
Para hacerlo, en 2021 vendió sus viñedos y bodega en Geyserville, una zona del condado de Sonoma famosa por su vino, que fueron adquiridos por la compañía Delicato Family Wines establecida en Napa Valley. Y había adelantado que lo haría si era necesario y así lo hizo para cumplir un sueño mayor del que no podemos esperar más para conocer nuevos detalles.
