El pasado año 2023 el brillante musical Chicago cumplió nada menos que dos décadas, pero sigue siendo una de las películas más apreciadas en su género. Cuando Rob Marshall llevó a la gran pantalla el famoso musical de Broadway de los años 70 en 2003 hacía solo un par de años del fenómeno de Moulin Rouge y, entre ambas, lograron revitalizar el interés por un género que había sido muy apreciado en su día y al que le debemos títulos tan míticos como Grease, West Side Story, Cantando bajo la lluvia o Sonrisas y lágrimas, por citar solo una corta lista, pero que, en los años 80-90 había dejado de resultarnos atractivo -a excepción de las películas Disney-.
De hecho, hoy por hoy siguen siendo muchos los que admiten huir de las películas del género o no acabar de disfrutar de los números e interpretaciones musicales, pero lo cierto es que, a principios del siglo XXI los directores volvieron a mostrar interés por este tipo de títulos y los espectadores respondieron positivamente, volviendo a darle una oportunidad.
En los primeros 2000 también destacaron películas como Hedwig and the Angry Inch, pero Chicago ha sido considerada como un punto de inflexión en la revitalización del género gracias a sus espectaculares cifras de taquilla y a su casi impecable acogida por parte de la crítica -con un 87% de puntuación en Rotten Tomatoes es uno de los musicales contemporáneos mejor valorados de la historia-, que se tradujo en un buen puñado de premios en la 75 edición de los Premios Oscars entregados por la Academia de Hollywood en 2003.
Dirigida por Rob Marshall en su debut cinematográfico y protagonizada, entre otros, por Renée Zellweger y Catherine Zeta Jones en los papeles principales, Chicago nos trasladaba hasta el Chicago de los años 20 para presentarnos la historia de Roxie Hart (Zellweger), una joven que sueña con actuar en el escenario del Onyx Club, al igual que la bailarina a la que admira, pero que ve frustrado su sueño cuando es arrestada por el asesinato de su amante, quien previamente la había engañado sobre sus contactos, y acaba en prisión. Una vez entre rejas, Roxie coincide en la cárcel con la mujer a la que tanto admiraba, Velma Kelly (Jones), una cantante de jazz que también ha sido condenada por matar a su marido y a su hermana tras haberles pillado en plena infidelidad.
En este escenario, un popular abogado llamado Billy Flynn (Richard Gere) será quien se encargue de defenderlas a ambas, llamando la atención de los medios y haciendo de Roxie la estrella de Chicago que siempre deseó ser.
Con una recaudación de más de 306 millones de dólares frente a los 45 millones de presupuesto, Chicago fue una película especialmente rentable para tratarse de un musical, tanto que se convirtió en la película de acción real del género en más taquillera de la historia hasta la fecha. Un récord que sostendría hasta que se lo arrebató Mamma Mia! en el año 2008.
El filme fue nominado en 12 categorías de los premios Oscar, llevándose finalmente 6 premios a casa, entre ellos el Oscar a Mejor película. Asimismo Chicago también se llevó los Oscar Mejor actriz de reparto (Catherine Zeta-Jones), Mejor dirección de arte, Mejor diseño de vestuario, Mejor montaje y Mejor sonido.
Tras Chicago, fueron varias las películas musicales que triunfaron en la primera y segunda década de los 2000, demostrando que es un género que nunca pasa de moda. Puedes verla como parte del catálogo de la plataforma de 'streaming' Netflix.
