Saw III estuvo a punto de cometer un error que habría sido demencial para la saga. En el corte original, que duraba más de dos horas, había una escena en la que John (Jigsaw, el asesino protagonista) se arrepentía de sus acciones. El propio Tobin Bell agradeció que la dejaran fuera, afirmando "Este tío sabe exactamente lo que está haciendo". Eso no significa, claro, que el final de esta película no fuera un error de cara al futuro: durante siete películas más hemos tenido flashbacks, spin-offs y recuerdos de Jigsaw constantes. Todo por el impacto.
Vamos a jugar a un juego
Un punto pivotal en la saga fue Saw V, una de las entregas en las que es más necesario haber visto las anteriores. Y es que la saga Saw se convirtió en -poco más o menos- una telenovela repleta de giros, continuidad y, eso sí, trampas mortales. En este caso, Mark Hoffman ya se había convertido en el nuevo antagonista de la cinta, en lo que pretendía dar nueva sangre a la franquicia después de que Amanda dejara la saga y trataran de revitalizarla gracias a Jill, la ex-mujer de Jigsaw.
La sofisticación de las trampas fue en aumento, y hay una en esta quinta entrega que está en el recuerdo colectivo: un hombre con la cabeza en una caja de metacrilato que se está llenando de agua. Para añadir emoción en estos momentos, la película mostraba pequeños flashes que apenas duraban un fotograma y en los que no sabías lo que estabas viendo. Realmente eran... fotografías del equipo de la película preparando la trampa en sí y bromeando con el actor. Y, efectivamente, dan mal rollo.
Por supuesto, Saw volvería con una sexta parte y un buen puñado más. En total, diez parte, con la undécima en camino, la contemplan. Aunque se supone que Saw X es el final del personaje protagonista, lo más probable es que Bell siga repitiendo su papel hasta que no pueda más (tiene 81 años, al fin y al cabo). ¿Quieres jugar a otro juego más? No, no saques el Catán, no me refería a eso.