Nadie puede negar que Arnold Schwarzenegger fue y sigue siendo uno de los grandes actores de acción. El pico de éxito de su filmografía estuvo en los 80 y 90, donde se dio a conocer con el inicio de grandes franquicias como Terminator y Predator. Mientras subía a la fama haciendo ganar millones de dólares a sus estudios, también recibía palos por parte de la prensa especializada.
Schwarzenegger nunca fue realmente valorado como actor -de hecho siempre fue una de sus luchas personales- y estrenó películas tan repudiadas como Eraser (1996). Este filme de acción tiene un 43% por parte de la crítica en Rotten Tomatoes; sin embargo, ha envejecido muy dignamente y, con los ojos actuales, es puro espectáculo.
Schwarzenegger interpreta a John 'Eraser' Kruger, un alguacil que trabaja para el Programa de Protección de Seguridad de Testigos y que está especializado en borrar testigos de alto perfil: finge sus muertes y les da nuevas identidades. En su última misión es el encargado de proteger a una ejecutiva llamada Lee Cullen, quien está involucrada en una peligrosa trama terrorista. Cullen trabaja para una compañía llamada Cyrez, donde se desarrolla un arma secreta de alta tecnología; pero la compañía ha descubierto que es una agente infiltrada del FBI.
El director, Chuck Russell -también a cargo de títulos como La máscara (1994) o El rey escorpión (2002)- quería a Schwarzenegger porque lo veía "como lo ve mucha gente: un personaje mítico, el más grande, y eso es lo que es Kruger". No se equivocó en su elección porque el actor lo dio todo en las escenas de acción. Aunque contaron con coordinadores y dobles profesionales, Schwarzenegger realizó él mismo alguna de las acrobacias. Por ejemplo, necesitó siete tomas -y pocas nos parecen- para descender 20 metros de manera vertical y realizar una voltereta hacia atrás en pleno aire. Por cosas así necesitaban a un verdadero héroe de acción.
"Poco original" pero con muchos fans
Eraser se estrenó en Estados Unidos en junio de 1996 y fue un éxito comercial, ya que llegó a los 242 millones de dólares tras haber costado 100 millones. Recibió una nominación en los premios Oscar al Mejor sonido, pero la crítica la destrozó.
"Poco original y totalmente inverosímil, Eraser es una película de acción de gran presupuesto en su forma más aburrida", recoge TV Guide Magazine. "Son los elementos típicos los que hacen que no sea más que una tontería: esta es una de esas películas en las que los buenos no fallan y los malos no pueden disparar para salvar sus vidas", escriben en San Francisco Chronicle.
Según el recuento de Metacritic, mientras la prensa especializada le da un 56/100, el público sube a un 7,2/10 y son muchos los que valoran su espectáculo de acción. Tras haberla reposado 30 años, Eraser resurge como una historia con un guion entretenido y escenas muy dignas, sobre todo para los fans del género -y de Schwarzenegger-.