Está claro que yo no estoy en el mismo momento que hace diez años, pero tengo la impresión de que las vibras en torno a Coachella han cambiado muchísimo. Atrás quedaron aquellos años en los que si eras "celebrity" no asistir a uno de los festivales de música más populares a nivel mundial era un cruz con la que debías cargar durante todo el año. Me refiero a esos tiempos en los que las modelos de Victoria's Secret se paseaban entre escenarios y Selena Gomez acudía con Kylie y Kendall Jenner, amiguísimas de Hailey Bieber. Nada más que decir. Bueno, sí, que por aquellos entonces la auténtica reina de la cita era Vanessa Hudgens.
Entonces había una estética muy señalada para ir a Coachella: los "looks" "boho-chic" con un punto étnico, con trazas de apropiación cultural a veces, eran lo más. Más tarde la cosa empezó a mutar en propuestas más increíbles, como las que todavía hemos visto también este pasado fin de semana. Sin embargo, algunas de las "celebs" que han acudido en 2024 como Hailey Bieber, Kendall Jenner o Taylor Swift, la persona que salvó el cine en 2023, han vuelto a apostar por algo que ya vimos el año pasado: la normalidad, los "outfits" relajados y cómodos y los maquillajes sencillos. ¿Un poco aburrido? Pues sí, sobre todo cuando puedes ir cual personaje de circo, pero es la realidad que se está imponiendo entre parte de los asistentes a la cita, algo que también se irá replicando en el resto de festivales que restan hasta finales de año.
En el caso de Taylor Swift, que ha ido con su pareja, el jugador de fútbol americano Travis Kelce, es una estética que además representa a las mil maravillas la nueva era que se aproxima en su música, con el disco The Tortured Poets Department cuyo lanzamiento es el próximo día 19, es decir, este viernes.
La cantante hizo acto de presencia con un "look" casi "total black", a excepción de su gorra verde. Una propuesta que consistió en unos pantalones cortos, una camiseta y una "bomber" "oversize", además de un bolso bandolera de piel vegana de Stella McCartney, no podía ser de otro modo siendo la diseñadora hija de Paul McCartney, una de las personas, personajes, que introdujo a Lisa Simpson al vegetarianismo, y unas zapatillas deportivas del mismo color.
La telonera de la polifacética artista, Sabrina Carpenter, es una de las grandes apuestas del festival, pero también ha actuado Ice Spice, que interpreta junto a Swift Karma, uno de los temas de Midnights. Lo mismo sucede con Lana del Rey, una de las cabezas de cartel, que canta con la autora de All Too Well su tema Snow on the Beach.
Este próximo fin de semana tendrán lugar las segundas jornadas de Coachella y como amante de la excentricidad en estos casos, yo solo pido un poquito más de alegría, un juego al que sí que han entrado "tiktokers" como Marina Rivers o Madeleine White.