El 4 de mayo de 1964 nacía en NBC Another world, una pequeña serie de media hora que, sin saberlo, duraría la friolera de 35 años más, hasta que el 25 de junio de 1999 llegara a su final tras 8891 episodios. Para que luego nos quejemos de One Piece. Esta telenovela americana fue la primera en muchas cosas: en hablar del aborto, en hacer un crossover con Guiding Light (otra telenovela de 18262 episodios), en lanzar dos spin-off (de una duración mucho más escasa) y de dar su primera oportunidad a un muchacho que, durante dos episodios, sería Chris, un chaval que jugaba al baloncesto.
Sal a jugar a la pitta
A lo largo de los miles de episodios de Another world pudimos ver (bueno, los americanos al menos) las caras de actores y actrices que después se harían una carrera en Hollywood, como Morgan Freeman, Kelsey Grammer, Anne Heche, Sarah Hyland, Ray Liotta, Lindsay Lohan, Luke Perry, Ed O'Neill o Melissa Joan Hart. Pero entre todos destacaba un chaval de 14 años deportista pero que también participaba en musicales y debates escolares: un tal William Bradley Pitt.
Así es: Brad Pitt empezó su carrera en esta telenovela, a la que siguieron papeles episódicos en series como Los problemas crecen, Dallas o Las pesadillas de Freddy. Era 1987 y aún todos sus papeles cinematográficos estaban sin acreditar, como en las películas Hunk el yuppie, La tierra de nadie o Golpe al sueño americano. Poco imaginaba que, en 1991, Thelma y Louise le iba a cambiar la vida para siempre.
Cuando Another world terminó, Brad Pitt ya tenía una nominación al Óscar por 12 monos. Curiosamente, con el fin de la telenovela no llegó el de sus personajes más queridos, que se fueron a otra que ya estaba en emisión, As the world turns, al menos hasta que en 2002 dos de los personajes murieron de manera violenta y decidieron dar por acabado el crossover. A estas alturas, Pitt ni estaba ni se le esperaba.