Elisabeth es una estrella de Hollywood en horas bajas. Por su edad, ya le están buscando una sustituta. Su jefe y su productor es el que más ganas tiene de deshacerse de ella. Una vez despedida, recibe un paquete: dentro de él hay un vídeo en el que se le informa de que si acepta formar parte de un peculiar proyecto, rejuvenecerá.
Así comienza The Substance, una película en la que envejecer es terrorífico y hay litros y litros de sangre. Demi Moore, Margaret Qualley y Dennis Quaid protagonizan el nuevo filme de la directora francesa Coralie Fargeat, que en 2017 llevó al cine Revenge, un 'rape y revenge' que le hizo ganar popularidad. Ahora, la cineasta compite por la Palma de Oro en Cannes con este filme.
Sin más dilación: The Substance es un cine muy bestia, bruto y una locura maravillosa llena de vómitos, tumores, sangre y pústulas. En definitiva, un 'splatter' que hará las delicias de todo fan del cine gore.
EROTISMO RETORCIDO
Al igual que demostró en Revenge, Fargeat comienza su película con un erotismo que luego se retuerce y se convierte en otra cosa. "A Fargeat le fascina mucho el cuerpo de las mujeres, aplicando una mirada que podría ser el inicio de un clip porno. Sustituye el ojo del hombre por el de la cámara y el cuerpo de la mujer es completamene erótico", explica Aljandro G. Calvo.
Como añade:
Es muy erótico, pero jugando a la trampa porque la película gira y te hace un 'body horror' que contrasta con los cuerpos perfectos del principio con la aberración absoluta de después. ¡Y funciona!
En cuanto a la parte actoral, Moore y Qualley "son dos diosas absolutas" por "entrega, por interpretación, por absoluta falta de miedo, por decidir meterse en este bernjenal". Moore se mete en la piel de Elisabeth, la artista de Hollywood aplastada por la edad, y Qualley en una mujer llena de ambición por ser joven y guapa. En cuanto a Quaid, el actor está "pasado de rosca" de forma positiva como el productor de Moore.
The Substance -que recuerda a Terry Gilliam en Brazil, a Darren Aronofsky en Requiem por un sueño y a Peter Jackson en Braindead. Tu madre se ha comido a mi perro- "se va metiendo en lo bizarro, el horror, lo hilarante, lo estrambótico, lo divertidísimo, en lo desagradable y vomitivo hasta llegar a un final que ya es historia del cine".
Si quieres estar al día y recibir los estrenos en tu email, apúntate a la Newsletter de SensaCine