Aunque, sobre el papel, Transformers empieza en 1984, lo cierto es que sus inicios se remontan a una década antes, cuando los primeros juguetes de Microman llegaron a las estanterías de las tiendas en Japón. Se trataba de figuras creadas por Takara Tomy que presentaban a cyborgs "a tamaño real" del planeta "Micro Tierra" disfrazados de figuritas para pasar desapercibidos. La historia es un sinsentido, pero, cuando en 1983, Hasbro vio sus posibilidades en una exposición de juguetes de Tokyo, todos tuvieron claro que tenían oro molido entre manos. Solo hacía falta una buena historia y un nombre a la altura: Transformers.
More than meets the toy
Al mismo tiempo, Takara Tomy también lanzó otra serie de juguetes llamada Diaclone, robots que se convertían en vehículos. Hasbro compró todos los derechos y los lanzó como Transformers en todo el mundo -incluyendo Japón-, con cómics y serie de animación acompañando. La historia de los Decepticons y los Autobots fue creada totalmente en Estados Unidos, pero la idea de los juguetes era japonesa.
Pero la saga no se ha olvidado de sus orígenes. En Transformers: el despertar de las bestias hay una referencia a aquella compañía japonesa nipona en un plano en el que están buscando en Internet información sobre los glifos que han aparecido en Perú. El artículo que leen está escrito por Asahi Takara y Daniel H. Tomy. O sea, por Takara Tomy, la empresa que hizo los juguetes en primer lugar.
Originalmente, la primera colección de Transformers constaba de 18 muñecos, pero ahora son más de 400 personajes e incontables figuritas. Vamos, que si quieres hacerte con todas vas a necesitar mucho más que un viaje a Japón a una exposición de juguetes.