Tiene una puntuación de 4,1/5 estrellas por parte de los espectadores de SensaCine y recaudó más de 583 millones de dólares en las salas de cine, pero Ready Player One está lejos de ser la mejor película de Steven Spielberg. Y no porque sea una mala película, sino porque el veterano cineasta amasa una carrera de seis décadas repletas de títulos que son pura historia del cine.
En cualquier caso, Ready Player One es una de las mejores películas de ciencia ficción de Spielberg, quien hace apenas tres o cuatro meses admitió que de estaba explorando la posibilidad de producir una secuela.
Protagonizada por Tye Sheridan, Olivia Cooke y Ben Mendelsohn, entre otros, y basada en el libro homónimo de Ernest Cline, Ready Player One se ambienta en un futuro distopico en el año 1945 en el que la mayoría de la población vive en la decadencia mas absoluta. Sin embargo, la mayoría de ellos lo sobrellevan conectándose a una realidad virtual llamada OASIS. Al morir, el creador de OASIS anuncia que ha dejado una serie de 'easter-eggs' escondidos que darán al que los encuentre su fortuna y el poder sobre su mundo.
"Poca duda cabe de que Spielberg ha pulido mucho la literatura de Cline (es notorio en el último tramo del largometraje), pero aún y así el toque mágico del Rey Midas se resiente (algo), sobre todo cuando nos damos cuenta de que debajo de los adoquines, esa pátina espectacular de píxeles destellantes, no está escondida la playa. Ni nada que se le parezca", reza la crítica de Paula Arantzazu Ruiz en su crítica de 3,5 estrellas para SensaCine.
Ya esté más cerca o más lejos, según gustos, de estar entre las mejores películas de Spielberg, ya solo por una de sus escenas la película merece la pena. Un escenario muy particular que en el que converge el universo del padre de E.T. y la de otro gigante del cine, Stanley Kubrick.
En la búsqueda del huevo de Pascua digital que les permita heredar la fortuna del magnate, los personajes de la película atraviesan numerosos escenarios y conocen a héroes de la cultura pop, lo que incluye la entrada en escena de una secuencia de la película El Resplandor.
El clásico de Stanley Kubrick, adaptación de la novela de Stephen King, se recrea con todo detalle en una escena de diez minutos. El Hotel Overlook, el baño, la sala de recepción, el laberinto, todo está ahí. Suficiente para transformar el entretenimiento convencional en una película de terror.
Aunque Jack Nicholson no aparece en este segmento, sí se sugiere su silueta. Y no es casualidad que Steven Spielberg haya elegido El resplandor: fue en el rodaje de esta película donde conoció a Stanley Kubrick por primera vez cuando el director de Jurassic Park visitó el set en 1979.
El estudio donde se rodó El resplandor se utilizaría más tarde para la primera Indiana Jones. Para esta escena se construyó realmente parte del decorado, como el baño, el ascensor y su pasillo, y se recreó digitalmente otra parte, la sala de vistas con las escaleras.
Diez minutos muy especiales y con mucho significado que llevan la experiencia a otro nivel.
