Emily in Paris es una de esas producciones que provoca sentimientos encontrados. Muchas de nosotras decidimos darle una oportunidad sedientas de propuestas que nos recordasen a otras series como Sexo en Nueva York, Gossip Girl o The Bold Type.
Y en parte puede llegar a saciar esa carencia que teníamos, o tenemos, pero también comprendo que haya mucha gente a la que no le haya terminado de convencer la propuesta de Netflix. Sin embargo, creo que esa es parte de su magia, ya que en mi cabeza es algo que está hecho queriendo. Emily es Emily. Una estadounidense que va de estadounidense, que se lo salta todo a piola y que hace y deshace a su antojo sin apenas consecuencias, ¿puede haber algo más "made in the United States" que esa actitud?
Y es que pienso que mucha culpa del rechazo que puede llegar a provocar la serie la tiene el personaje interpretado por Lily Collins. No obstante, no vengo aquí a hacer un análisis en profundidad de estos porqués o de las razones que hacen que Emily se pueda permitir llevar el tren de vida que lleva.
De hecho, vengo a comentar cuál de todos los looks que ha llevado durante esta temporada de rodaje se ha convertido de forma indiscutible en su preferido, algo que ha desvelado a través de su propia cuenta de Instagram la actriz.
Se trata de una propuesta firmada por el director creativo de Nina Ricci, una firma totalmente revitalizada y de una forma muy inteligente y coherente por el fantástico Harris Reed, que además de estar al cargo de la casa de moda tiene su propia marca homónima.
Reed se ha convertido en los últimos tiempos en uno de los diseñadores favoritos de estrellas como Harry Styles, Florence Pugh o la mismísima modelo Iman, a la que vistió para asistir a la Met Gala.
La propuesta que ha conquistado el corazón de Lily Collins se trata de un "catsuit" de rayas blancas y negras con una sobrefalda negra y acompañada de una gran pamela, un accesorio imprescindible en el imaginario de Reed, y un antifaz. Además, tiene una capa blanca.
El "outfit" del personaje de Emily tiene mucho del de Audrey Hepburn en My Fair Lady, una actriz con la que desde siempre se ha comparado a la joven intérprete desde prácticamente su adolescencia por las facciones de la misma. Así describe Collins su vivencia en cuanto a esta parte de su trabajo:
"Vamos a armar un poquito de revuelo por este vestidazo/mono. Sin duda, se trata de mi propuesta favorita de la temporada número cuatro y está diseñado por mi querido amigo Harris Reed. Trabajar con él, con el equipo de Nina Ricci y con Marylin Fitoussi ha sido una experiencia de ensueño. Desde que leí el guion supe que la persona idónea para hacer este trabajo era Harris. Cada detalle está perfectamente pensado e inspirado y encaja a la perfección con todo lo que es Emily. Y por supuesto, ¡mil gracias al equipo de belleza por lograr que todo funcionase con su enorme talento! Siempre consiguen llevarlo todo al siguiente nivel. No puedo dar las gracias de forma suficiente por este momentazo".
