Hace unos días mi amigo Juan me preguntó que si yo, que ahora estoy soltera después de 11 años, estaba buscando, o me apetecía, tener una relación más formal con alguien. Mi respuesta fue que si surgía pues sí, claro. Es decir, no tengo intención de forzar la máquina, pero no quiero negarme a nada que suponga la posibilidad de añadir más felicidad a mi vida. Además, a veces lo inesperado es lo que mejor sale, ¡que se lo pregunten a Matt Damon y Luciana Barroso!
El matrimonio del actor con su esposa es uno de los más estables de Hollywood, al igual que sucede con el de Michael Douglas y Catherine Zeta-Jones, aunque estos hayan tenido más altibajos, o al menos los hayan hecho más públicos. El protagonista de Ocean's Eleven conoció a la argentina en 2003, mientras esta trabajaba de camarera en un bar.
Al parecer Damon se encontraba en Miami, que no en la Costa Blanca, su lugar favorito de España, rodando una de sus películas y acabó con parte del elenco en el lugar de trabajo de Barroso, que en 2018 confesó a Vogue Australia, algo bastante extraño porque suele mantener un perfil bajo de cara a los medios, que según el intérprete, este se fijó en ella nada más llegar porque tenía una luz especial, algo sobre lo que ella bromeó diciendo que evidentemente que la tenía, ¡estaba en un bar lleno de luces!
Sin embargo, la cosa no se quedó ahí, ya que como Luciana Barroso relató para la publicación australiana, ya por aquel entonces su marido comenzaba a ser bastante conocido y llegó un momento en el que la gente, con el añadido además del alcohol, comenzó a pasarse un poquito de la raya con él, por lo que el actor decidió esconderse detrás de la barra.
Fue en ese momento cuando ella le dijo que no había problema en que se quedase allí, siempre y cuando la ayudase en su trabajando preparando y sirviendo bebidas. Y claro, como buen especialista en amoldarse a diferentes papeles, Matt Damon entró por el aro y además con mucha maestría, ya que se había entrenado como "bartender" para una de sus películas. ¿Qué sucedió? Pues que todo el mundo estaba flipando y quería que lo sirviese él, lo que desembocó en que esa noche Luciana Barroso se llevase un buen puñado de propinas.
Cuando la noche tocaba a su fin y Damon y sus compañeros se disponían a marcharse a otro lugar para seguir con la fiesta, este le propuso a la que más tarde se convertiría en su esposa que los acompañase, a lo que ella contestó de forma tajante que no, ya que por aquel entonces ya era madre de su hija Alexia, que había nacido en 1999.
No obstante, esto en lugar de ahuyentar a Matt Damon hizo que se interesase más por Luciana Barroso y le comentó que entendía a la perfección que esa fuese su prioridad. ¿Es esto algo extraordinario? Pues la verdad es que no, pero tal y como está el mercado hace que el agente Jason Bourne parezca nada más y nada menos que San Pedro. También para Vogue Australia Luciana comentó que nunca, en ningún momento, para Damon fue un problema que ella ya tuviera una hija de una relación anterior y que eso fue una de las cosas que le conquistó de él.
Finalmente, Luciana Barroso y Matt Damon se dieron el "sí, quiero" en 2005, dos años después de conocerse, y siguieron aumentando la familia con tres niñas más: Isabella, de 18 años, Gia, de 15, y Stella, de 13. Además, hay una máxima que los siempre intentan cumplir para cuidar su relación, y es la de estar como máximo sin verse dos semanas, algo que también llevan a cabo otras parejas de Hollywood para poner un poco de cordura en sus vidas personales y de pareja entre tanto caos profesional y mediático.