He de reconocer que tengo una gran debilidad por la actriz belga Virginie Efira. La conocí en Los casos de Victoria, una divertida comedia romántica dirigida por la ahora multipremiada Justine Triet (Anatomía de una caída). Su personaje de mujer madura, abogada, y en crisis, me enamoró hasta la médula. A partir de entonces, película de Virginie Efira que caía en mis manos, película que devoraba con avidez.
Me parece una actriz superlativa a la que el papel que la envíe al estrellato parece que se le resista. Quizás no lo necesite. Ahora, precisamente, estrena su nueva película, un drama que aborda la violencia de género dirigido por la también actriz Valérie Donzelli (Declaración de guerra) y coprotagonizada, entre otros, por Melvil Poupaud (Golpe de suerte), Virginie Ledoyen (La playa), Dominique Reymond (El amante doble), Romane Bohringer (La camarera del Titanic) y Nathalie Richard (Nunca me abandones). Su título: Solo para mí.
Un día, Blanche Renard (Efira) cree haber conocido al hombre de sus sueños, llamado Greg Lamoreux (Poupaud). Una gran pasión crece entre ellos, les consume. Es tal el amor que siente por él, que decide reinventarse a sí misma y abandonar a su familia, incluso a su hermana gemela, Rose. Sin embargo, poco a poco, se irá dando cuenta de que no todo es lo que parece, que resulta ser tremendamente posesivo y muy peligroso. Y, a pesar de todo, le aterra denunciarle.
La película, adaptación de la novela homónima de Éric Reinhardt, logró el premio César al Mejor guion adaptado y, desde su estreno en Francia, logró cosechar muy buenas críticas. Por ejemplo, desde Cineuropa aseguran que lo que la directora ofrece, es "su mejor película hasta la fecha, trazando con agudeza formidable y novelística la trayectoria de una mujer cayendo bajo el control de un hombre".
Otra crítica muy positiva fue la que apareció en Variety, que definía a la cinta como "un psicodrama francés muy tenso y en el que la directora aporta un crudo filo emocional". En IndieWire escribieron de ella que "su capacidad para rastrear un caso infernal de maltrato doméstico hasta sus orígenes hace que merezca la pena".
La película fue estrenada en cines en Francia el año pasado, pocos días después de su presentación en Cannes. Ahora llega a nuestras carteleras, por fin, una de las apuestas más interesantes de la filmografía francesa del año pasado, además de necesaria y oportuna… Otra mirada más a cuán necesario es el feminismo y que las voces acosadas denuncien. Y que los hombres no nos demos la vuelta y colaboremos en la lucha.