Cuando Trey Parker y Matt Stone consiguieron que sus cortos cutres se convirtieran en una serie de televisión titulada South Park, la mega-estrella George Clooney, que fue vital para su éxito (enseñó los VHS originales en todos los sitios) pidió un papel pequeño en la serie como fan irredento. Los creadores se lo dieron: fue, desde entonces, Sparky, el perro de Stan. Más adelante, eso sí, le darían otros pequeños papeles. Por ejemplo, en South Park: más grande, más largo y sin cortes interpretó al doctor que le cambia el corazón a Kenny por una patata asada. Poco a poco, George. Poco a poco.
El actor desaparecido
Igual que George Clooney en South Park, Brad Pitt aceptó hacer el cameo más corto posible en Deadpool 2: solo se le ve durante un segundo antes de morir y el resto de la película es invisible. En un principio, Ryan Reynolds le quería para otros papeles más potentes, pero no pudieron cuadrar agendas y Pitt acabó aceptando este papel por el sueldo más bajo posible "y una taza de café". Pero la broma no quedo aquí.
Y es que en Amigos Imaginarios, de John Krasinski, en la que también sale Ryan Reynolds, en los títulos de crédito aparece listado Brad Pitt como Keith, otro personaje invisible que no dice una sola palabra. Y no, en este caso ni siquiera aparece unos segundos. Es más, la broma se completa cuando le presentan como "Introducing Brad Pitt", la fórmula utilizada para presentar actores novatos que hacen un primer papel.
Paramount
Reynolds le devolvió el favor a su amigo en Bullet Train, por cierto, donde aparece en un plano visto y no visto. ¿Seguirá Brad Pitt haciendo papeles invisibles en Hollywood? ¿Se convertirá en tendencia? Por favor y gracias.
