Tranquilidad es lo que debe de sentir Russell Crowe al ser uno de los grandes nombres de la industria cinematográfica y poder permitirse rechazar franquicias millonarias sin despeinarse. Hace poco publicábamos que había dicho que no a Peter Jackson y El señor de los anillos porque sintió que iba a ser "un obstáculo" para él. Nunca se ha arrepentido de haber dicho que no y posiblemente lo piense de otras decisiones polémicas de su carrera.
Ésta, en concreto, pudo haber cambiado su destino en Hollywood. Crowe rechazó ser Lobezno a comienzos de los 2000 por una sencilla razón: no quería más lobos en su filmografía. "Si recuerdas, Maximus [de Gladiator] tiene un lobo en el centro de su coraza, y tiene un lobo como compañero... lo que pensé que iba a ser un problema mayor [en ese momento]... Así que dije que no, porque no quería ser 'lobuno', como 'Sr. Lobo", confesó a News.com.au.
20th century Fox
Una excusa un tanto extraña pero suficiente para él. De este modo, el intérprete dejó pasar una oportunidad millonaria. En total, Hugh Jackman, quien sí que aceptó el encargo, ha ganado unos 100 millones de dólares por interpretar al mutante. Según ScreenRant, comenzó con 500.000 dólares por X-Men y fue tan bien acogida que para X-Men Orígenes: Lobezno ya estaba ganando 20 millones. En cintas como X-Men: Días del futuro pasado, donde tiene un protagonismo menor, recibió 7 millones. Si incluimos bienes gananciales de los estrenos en cines, merchandising, licencias de imagen y demás, hacen una verdadera fortuna.
Pocos años después protagonizó Una mente maravillosa (2002) -con la que recibió una nominación al Oscar-, Master and Commander (2003) y Cinderella Man (2005). Tres grandes títulos para tener en una carrera sólida y algo nos dice que Crowe es un tipo más de producción independiente que de gran franquicia. Después regresaría a Marvel interpretando a Zeus en Thor: Love and Thunder, aunque su grado de implicación es mucho menor del que hubiera tenido siendo Lobezno.
Crowe, el ángel de la guarda de Jackman
No sabemos cómo habría sido nuestro mundo si Russell Crowe hubiese aceptado el papel de Lobezno -¿habría tenido tanto éxito el mutante? ¿el australiano se habría convertido en director igualmente?-, pero sí sabemos que Hugh Jackman hizo un trabajo fantástico y resulta que, en parte, fue gracias a Crowe. "Llamó a Bryan, Bryan Singer, el director, y le dijo: 'No quiero hacerlo, pero deberías considerar a este tipo'", desveló el actor que da vida a Lobezno. El otro "tipo" era Jackman y el resto es historia.
Crowe volvió a pasarle un trabajo a Jackman unos años después. "Le debo algo porque él rechazó dos de los papeles más importantes que he interpretado en mi vida y me sugirió a mí para ellos. En X-Men, fue la primera opción de Bryan Singer para Lobezno, y también me mencionó para Australia (de Baz Luhrmann) . Es realmente muy inteligente y generoso”, declaró a Entertainment Weekly.
