Si tienes ya cierta edad, me apuesto lo que haga falta a que alguna vez en tu vida has dicho "la vida es como una caja de bombones, nunca sabes cuál te va a tocar". Forrest Gump no sabía que la mayoría de cajas trae la chuleta con los ingredientes en la parte de abajo y tampoco que ese conjunto de frases terminaría siendo todo un hito cinematográfico. El equipo de la película la incluyó en el metraje final de casualidad y no se esperaban en absoluto esa enorme acogida por parte del público.
En una entrevista de Tom Hanks con CinemaBlend, el actor desveló que la frase, dicha sin pretensiones y simplemente por rellenar, iba a ser un mero recurso narrativo.
Todo lo que filmamos en el banco del parque de Savannah, Georgia, lo filmamos como recurso para una posible pieza narrativa. Le dije a Bob [Zemeckis]: '¿A alguien le va a importar este idiota sentado en un banco? ¿Qué es eso?'. Nadie sabe qué hay en esta caja
Hanks confesó que "la caja de bombones" era una de tantas otras frases que dijo sentado en ese banco. "Probablemente fueron como, ya sabes, 13 páginas de diálogo que tuvimos que filmar en un día y medio. Y así fue escrito en fichas de referencia. Después de un tiempo, ya no necesité las fichas de referencia porque te metes en el asunto. Pero Bob dice: "No sé, es un campo minado, Tom, es un campo minado. ¡Nunca sabes qué se va a llevar la gente de esto!", dice el intérprete.
La escena es tan legendaria que incluso hay una versión de la película en formato físico con forma de caja de bombones y ha sido parodiada en decenas de películas y series. Pero no es la única ocasión en la que la suerte les ha sonreído.

Otra de sus frases memorables fue improvisada
Además de la caja de bombones, la otra gran frase que todos recordamos de la cinta es "Me llamo Forrest. Forrest Gump". Casualmente, esta línea de diálogo no estaba en el guion y se le ocurrió a Tom Hanks mientras estaban rodando una escena en el autobús. A Robert Zemeckis le gustó, así que la mantuvo en el montaje y, así como quien no quiere la cosa, terminaron regalando al cine otra frase legendaria.
El legado de la cinta de Robert Zemeckis es largo y hasta a dado pie a una cadena de restaurantes estadounidense con el nombre de Bubba Gump Shrimp Company.