La ciencia ficción es uno de los géneros más demandados por el gran público. Netflix siempre ha apostado por él con grandes producciones. Sin embargo, la jugada no siempre les ha salido bien. Rebel Moon (2023 - 2024), la saga dirigida por Zack Snyder, fue un fracaso de crítica y de público -ni siquiera se coló en el top de los títulos más vistos de la historia de la plataforma de 'streaming'-, pero eso no ha quitado las ganas a la compañía de invertir a lo grande en otro proyecto del mismo género. Estado Eléctrico ya está disponible en la plataforma de la gran ene y rompió un récord antes de su estreno.
Estado Eléctrico, dirigida por Anthony y Joe Russo, es la película más cara de la historia de Netflix. El proyecto, una adaptación de la novela gráfica de Simon Stålenhag, ha costado la friolera de 320 millones de dólares. Hasta este filme, los proyectos con más presupuesto de la plataforma eran Alerta roja (2021) y El agente invisible (2022), con un coste de 200 millones de dólares cada una.
Para que entiendas mejor los números: Vengadores: Infinity War (2018) -también de los hermanos Russo, al igual que El agente invisible- es la duodécima película más cara de la historia y costó 325 millones de dólares. Estado Eléctrico ocupa actualmente el trigésimo puesto, por encima de The Marvels (2023), que costó 307 millones de dólares.
¿Y si la rebelión de los humanos contra los robots falla?: sale una "delicia spielbergiana" que pronto se estrena en NetflixLa película, protagonizada por Millie Bobby Brown y Chris Pratt, se ambienta en un mundo en el que los robots se han revelado contra los humanos y una guerra ha dejado un panorama desolador. La historia sigue a una adolescente huérfana llamada Michelle que, con ayuda del excéntrico Keats y un robot, cruza el Oeste de Estados Unidos más encontrar a su hermano pqueño desaparecido.
El peligro de obsesionarse por el presupuesto
Netflix
Los hermanos Russo habaron en SensaCine del elevado presupuesto de Estado Eléctrico. "Sé que la gente lo dice, pero no sabemos si es cierto. No sé cuánto cuestan las películas", dijo Anthony, un cineasta que, junto a su hermano, está más que acostumbrado a hacer producciones de elevado coste como Vengadores: Endgame (2019).
"Creemos que es peligroso obsesionarse con el coste de las películas solo porque son caras. Si haces películas gigantes, van a costar dinero. Y, por lo general, al público general no le importa cuánto cuesta algo. Solo quieren saber si les entretuvo o no", añadió Joe. "Cada película es como una oportunidad única. Así que quieres que cada película salga bien, sin importar cuánto gastes. Todas son difíciles de hacer", apuntalo Anthony.
