Han pasado 13 años desde que la saga Crepúsculo llegó a su fin con el estreno de la última película, La saga Crepúsculo: Amanecer - Parte 1, y, aunque probablemente siempre sean recordados por una parte del público por sus papeles de Bella y Edward, lo cierto es que sus protagonistas supieron dejar atrás esa etapa y le dieron un lavado de cara a su carrera apostando por películas independientes y dejando de lado el cine más comercial al menos por un tiempo.
De hecho, el propio Robert Pattinson nunca ha escondido que no disfrutó especialmente de la etapa en la que la adaptación de la saga vampírica adolescente fue un fenómeno, aunque agradece el empujón que le brindó a su carrera. Hace unas semanas llegaba a las salas de cine la más reciente película del británico, Mickey 17, la nueva propuesta de ciencia ficción del director surcoreano Bong Joon ho, el director de Parásitos.
El actor ha contado en alguna ocasión que lo pasó muy mal cuando se metieron con él cuando se anunció su fichaje como Edward y también que le resultó raro cómo la gente respondió a la saga, puesto que él, desde un primer momento, había pensado en ella como una historia "rara" y no como una historia romántica diseñada para levantar pasiones. "Es una historia rara, Crepúsculo. Es extraño cómo la gente respondió a ella. Supongo que los libros son muy románticos, pero al mismo tiempo, no es romántica al estilo El diario de Noa. Crepúsculo va sobre un hombre que encuentra a la chica con la que quiere estar y a la que también quiere comerse", contó a Jennifer Lopez en un episodio de Actors on actors de Variety.
De hecho, Pattinson defiende que la película se creo como un proyecto 'indie' o eso es lo que él percibió en un primer momento: "Para mí, Catherine Harwicke, que iba a dirigirla, había hecho esta película llamada Thirteen y otra película llamda Los amos de Dogtown y eran películas pequeñas. Películas pequeñas y duras. Y Kristen [Stewart] estaba también, y había estado en Hacia rutas salvajes, y era de tipo 'indie", concluye.
Luego, ya en el rodaje, el actor británico se dio cuenta de que tenía algunas diferencias creativas con el equipo y, tal y como contó a GQ en una entrevista en 2022, estuvo a punto de ser despedido por querer cambiar el tono de la película.
Quería que fuera lo más artístico posible. Teníamos una extraña tensión: el estudio tenía miedo de hacer las cosas demasiado emo. Pensé que era la única manera de manejarlo. Pasé tanto tiempo [en el set] furioso... No puedo creer cómo actuaba la mitad del tiempo
Al final, la situación se puso tan tensa que Pattinson recibió la visita de sus representantes en el set y le pidieron que sonriese un poquito más o acabaría siendo despedido: "Bien, entonces, sea lo que sea que estés haciendo ahora, después de almorzar haz lo contrario, o te despedirán al final del día". "Eso fue lo único que me hizo sonreír un poco", admitió.
Y no se equivocaban. La directora de la primera película de la saga, Crepúsculo, Catherine Hardwicke, admitió en una entrevista con el podcast Happy Sad Confused en 2023 que el estudio dudó de la elección de Pattinson en el papel desde el primer momento y que fue ella quien insistió en que era idóneo.
Teniendo en cuenta que no era especialmente fan de lo que estaba haciendo quizá no lo era, pero la saga acabó recaudando miles de millones de dólares.