Tras volarnos a todos la cabeza con El sexto sentido, una película cuyo giro probablemente no hubiera tenido el mismo efecto a día de hoy pero que en su momento nos coló por completo, en 1999, M. Night Shyamalan se convirtió en una de las grandes promesas de Hollywood. Un cineasta de apenas 30 años que estrenaba su tercera película y que hasta llegó a ser señalado como "el nuevo Spielberg". Un apodo que sin duda eran palabras mayores, pero que hizo suyo por un breve periodo de tiempo cuando sus siguientes películas -El protegido (2000), Señales (2002) y El bosque (2004)- resultaron estar a la altura de lo que se espetaba de él.
Sin embargo, la montaña rusa que acabaría caracterizando la carrera del cineasta en los siguientes veinte años estaba a punto de experimentar el primer descenso de su recorrido: Shyamalan encadenó una serie de fracasos seguidos que comenzaron con La joven del agua en 2006 y alcanzaron su punto más bajo en 2010 con el estreno de Airbender. El último guerrero, considerada la peor película de la carrera del director.
Una película de fantasía y aventuras que estaba basada en la primera temporada de la serie animada de televisión de Nickelodeon Avatar: The Last Airbender y que fue un absoluto fracaso.
Airbender. El último guerrero se emite hoy, viernes 21 de marzo, en el canal de TDT Be Mad a las 22 horas.
A pesar de que M. Night Shyamalan había contado con el mayor presupuesto para una película que nunca antes en su carrera -150 millones- y de sus planes de que el filme pudiera iniciar una exitosa saga de fantasía formada por tres películas, el director se encontró con las peores críticas que había recibido nunca.
"Uno de los suicidios autorales más notables de los últimos tiempos"
De hecho, Airbender: El último guerrero tiene la peor puntuación recibida por una película del director en Rotten Tomatoes -un 5%- y sobre ella se escribieron cosas absolutamente contundentes. "Uno de los suicidios autorales más notables de los últimos tiempos", escribió sobre ella Virginia Montes en su crítica de 0,5/5 estrellas para SensaCine. "Shyamalan, a pesar de las ínfulas megalomaníacas que siempre ha tenido, se muestra incapaz de manejar un gran presupuesto, desperdiciando las oportunidades de lucimiento que los escenarios y la tecnología le permitían. Incluso consigue que los efectos especiales parezcan más cutres de lo que realmente son. [...] La peor película de su carrera y la demostración de que algunos autores, deberían dejar ciertos asuntos para personas más cualificadas".
Con más de 300 millones de dólares recaudados, Airbender salvó el fracaso comercial, pero los palos recibidos arruinaron cualquier plan de continuidad que pudiera existir. La película fue considerada la peor de 2010 y se llevó los Razzies a Peor película, peor director, peor guion, peor (des)uso de 3D y peor actor para uno de sus protagonistas.
Sin embargo Shyamalan nunca reconoció el patinazo, explicando que fue valorada como una película para adultos cuando en realidad se trataba de una película infantil y a que a su verdadero target sí le había gustado: "Todo fue muy raro. La media de edad de seguidores de la serie era de diez años. Podía hacer una película para ese 'target' o bien podía hacer una nueva Transformers protagonizada por Megan Fox".
En Airbender. El último guerrero el planeta está dominado por la Nación del Fuego. Las llamas arrasan el mundo entero y declaran la guerra a las naciones vecinas: el Aire, el Agua y la Tierra. Las tribus de estos lugares solo tienen dos opciones: rendirse por completo o morir. En este escenario, Aang es el único capaz de dominar los cuatro elementos y es el elegido para acabar con el conflicto y poner fin a esta masacre, pero por el camino se encontrará con serias dificultades que tendrán que superar.