Jean Claude Van Damme encadenó dos grandes éxitos al inicio de su carrera: Street Fighter -que alcanzó 100 millones de dólares en taquilla- y Timecop, policía en el tiempo, que le reafirmó un poco como una de las grandes figuras de acción del momento. Van Damme se veía en la cresta de la ola y creía tener la capacidad de negociar una gran suma de dinero.
Después de haberse llevado 8 millones de dólares por la adaptación del videojuego, al belga le propusieron firmar un contrato por tres películas por el que se llevaría unos 12 millones por cada una de ellas. Le pareció una miseria y no se le ocurrió otra cosa más que contestar: "Quiero 20 millones de dólares como a Jim Carrey", declaró a The Guardian. No le pudo salir peor, porque lo que pasó fue que se pasó los siguientes 13 años en películas de bajo presupuesto.
"Quiero 20 millones de dólares": así dejó escapar Jean-Claude Van Damme una de las mayores oportunidades de su carrera"Estaba hecho polvo, tío. Pero, ¿sabes?, no era por el dinero. Hacía película tras película, y entre película y película, hacía promoción. Estaba cansado. Todo lo que tocaba daba dinero. Jim Carrey cobraba una fortuna", añade en la entrevista con dicho medio.
Yo quería jugar con el sistema. Como un idiota. Ridículo. Estaba en la lista negra. Eso era todo

Van Damme estuvo 13 años sobreviviendo en la industria a base de películas de acción que se lanzaban directamente a DVD, especialmente con el director hongkonés Ringo Lam. Y puede que le tuvieran en una lista negra, pero la verdad es que por aquel entonces el intérprete tenía graves problemas de adicción.
Steven E. de Souza, quien dirigió Street Fighter, declaró en una entrevista con The Guardian que iba "drogado hasta la médula". "El estudio había contratado a un cuidador para que lo cuidara, pero, por desgracia, el propio cuidador era una mala influencia", añade De Souza, "Jean-Claude llamaba tantas veces para decir que estaba enfermo que tuve que seguir mirando el guion para encontrar algo más que filmar".
"Iba drogado hasta la médula": nadie tiene buen recuerdo de Van Damme en esta mítica película de acciónA eso hay que añadir que fue diagnosticado con un trastorno bipolar. Pasó por rehabilitación para eliminar todos los malos hábitos, pero no funcionó y la dejó de golpe. Era una mala época para él, que se pasaba de fiesta todos los días, conducía borracho, terminaba arrestado, se peleaba con los paparazzi que le seguían... Un enorme bache del que salió cuando protagonizó JCVD en 2008.
En ella, se interpreta a sí mismo como un actor fracasado con numerosos problemas: impuestos sin pagar, escasos trabajos, hijos a los que no ve... Es un increíble drama dirigido por Mabrouk el Mechri que demostró que podía ser un buen actor, pero no ha vuelto a estrenar nada así. Eso sí, ha triunfado en taquilla con Los mercenarios. Una saga que, por cierto, rechazó la primera vez.