"Si el gobierno no cambia de idea vamos a desertar los festivales de Roma, Venecia y Turín". Así de contundentes se mostraban las mayores asociaciones de productores y distribuidores de cine, Anica, Agis y Api en un comunicado oficial. Por su parte, Angelo Barbagallo, presidente de API, la asociacióna de autores y productores independientes, añadió que "si el paquete fiscal no incluye una serie de medidas, los filmes italianos no participarán en el festival de Venecia".
Entre éstas, se encuentran algunas tan importantes para el sector como que se retome la llamada ley para "salvar el cine", que prevee una serie mecanismos y excensiones fiscales para las empresas que invierten en el cine de calidad y de autor. Esta ley fue aprobada por el gobierno de centroizquierda anterior con el apoyo de todos los partidos y fue avalada por el ministro de Cultura actual, Sandro Bondi. Pero finalmente, el gobierno actual de Berlusconi ha decidido retirarla del paquete de medidas fiscales que va a someter a la aprobación del Parlamento esta semana.
Así pues, los productores iniciarán el boicot en Venecia del 27 de agosto al 6 de septiembre para poner de manifiesto que esta actuación representa, según reza el comunicado emitido por los productores, "un golpe mortal al cine italiano, justo en el momento en el que ha demostrado a nivel internacional una gran vitalidad artística e industrial".
Marina Domingo Monsonís (Fuente: EFE)