Tras el estreno de El legado de Bourne, el productor de la película de acción, Frank Marshall, dijo que esperaba que Matt Damon volviese para la quinta entrega y acompañar, así, al nuevo protagonista Jeremy Renner (que interpreta en la saga a Aaron Cross). Pero ha sido el propio actor el que ha acabado con esta posibilidad.
"Aunque no he visto la película, creo que El legado de Bourne narra los hechos de El ultimátum de Bourne de una manera diferente. Lo que significa que, puesto que aparecen los personajes y los actores de las tres primeras, todo lo que se dice en esta nueva entrega es ahora real y que tendríamos que incluirlo en cualquier película que hiciéramos nosotros. Eso me pone las cosas muy complicadas para volver" afirmó Damon.
El legado de Bourne ha recaudado cerca de 232 millones de dólares alrededor de todo el mundo, con lo que ha hecho más dinero que la primera entrega de la saga, pero debido al precio actual de las entradas y los ingresos generados por el resto de las secuelas, se puede considerar que éstos son muy pobres.
De hecho Damon afirmó en su día que el rodaje de El ultimátum de Bourne fue un infierno, y algunas fuentes afirman que el guionista de la cinta Tony Gilroy (director de esta última entrega) tuvo gran parte de la culpa. De todos modos, Universal Pictures no descarta el retorno de Paul Greengrass tras las cámaras y de este modo convencer al actor para que vuelva a la saga con un proyecto de gran empaque.
A Damon le veremos próximamente en Elysium, la nueva cinta de ciencia-ficción de Neill Blomkamp, y en el drama Promised Land.
Tomás Andrés