Seth MacFarlane, presentador de los pasados Premios de la Academia, revelaba en su cuenta oficial de Twitter que "de ninguna manera" volvería a presentar la gala de los Oscar aunque haya sido "muy divertido".
Pese a que la actuación de MacFarlane consiguió numerosas críticas por sus continuos chistes antisemitas y machistas, al cómico le salieron los números, logrando aumentar la audiencia de la ceremonia con 40,3 millones de espectadores en Estados Unidos. Con un aumento del 19 % entre los espectadores de 18 a 49 años, la contratación de Seth MacFarlane cumplió con el cometido de incrementar la franja demográfica más codiciada por los anunciantes y por la Academia.
Así, los Premios Oscar de este año se convierten en el evento de entretenimiento televisivo más visto en tres años y el segundo más visto desde 2005 entre los adultos de 18-49. Con estos datos, la ceremonia de los Oscar demostró su hegemonía frente a otras galas de entrega de premios, superando fácilmente a los Globos de Oro (20,6 millones de espectadores) y a los Grammy (11,9 millones de espectadores).
Seth MacFarlane, que ha confirmado la realización de Ted 2, deja con su debut y despedida el listón muy alto, asignando a la Academia el gran reto de conseguir para el próximo año un presentador que supere los niveles de audiencia conseguidos en los Oscar 2013.
Andrés Orrego