"Creo que es algo tan grande y tan masivo para tanta gente que la clave para avanzar es rendir homenaje pero no recrear lo que se ha hecho antes". Con estas palabras JJ Abrams explicaba cómo iba a hacer frente a los retos de dirigir Star Wars: Episode VII, el nuevo capítulo de la saga intergaláctica por excelencia, y sobre el que se han creado unas expectativas estratosféricas. Abrams se encontraba en la conferencia Produced by, que ha tenido lugar el pasado sábado en los estudios de 20th Century Fox, y en donde también ha revelado que el rodaje del Episodio VII de Star Wars comenzará a rodarse a principios de 2014.
"Lo más probable es que viajemos a Londres a final de año para la película de Star Wars" dijo. Palabras a las que añadió una confesión muy íntima: su terror a filmar en el extranjero -"me vuelve loco", explicó-. Abrams no tuvo reparos en comentar que habría preferido rodar en Los Ángeles. Pero, como se encargó de aclarar, Disney ya tenía la agenda cerrada cuando le ficharon.
Poco más añadió Abrams sobre el nuevo episodio de La guerra de las galaxias, aunque sí tuvo palabras sobre George Lucas, el creador de la saga y propietario de los derechos antes de que se los vendiera a Disney: "George Lucas llevaba muchos años diciendo que quería algo más pequeño, hacer filmes más experimentales y confío en que los haga porque me encantaría verlos."
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Paula Arantzazu Ruiz
