Tom Hanks (Naufrago, Philadelphia), Christian Bale (El maquinista), Jared Leto y Matthew McConaughey (Dallas Buyers Club) o Renée Zellweger (Bridget Jones) son algunos actores que han tenido que variar su peso corporal por exigencias del guión. Ahora, se les une Jake Gyllenhaal, quien ha perdido casi 10 kilos para su papel en el thriller Nightcrawler. El intérprete de Brokeback Mountain, quien actualmente se encuentra rodando el filme en Los Ángeles, se habría herido, además, la mano tras golpear un cristal, según informa la revista People. Y aunque este tipo de accidentes no son motivo de susto, la escandalosa delgadez del intérprete ha hecho saltar las alarmas por si todo hubiera podido ir a más.
Gyllenhaal fue enviado a la sala de emergencias tras rajarse la mano derecha con un espejo, explica People. El incidente no ha ido a más, ya que en el centro hospitalario le atendieron enseguida. El actor golpeó el espejo con el puño, provocándose una herida, en lo que fue el colofón de una intensa jornada laboral, de más de 15 horas seguidas en el set de rodaje.
Sea como fuere, el actor, de 32 años, se está recuperando del accidente lo más rápido posible para continuar con el rodaje de Nightcrawler, donde interpreta a un periodista demasiado obsesivo con el trabajo. Esperamos su pronta reincoporación al set, y seguiremos informando del proyecto, un nuevo paso en la carrera de este prolífico actor que acaba de estrenar Prisioneros y que en febrero de 2014 estrena en nuestro país Enemy.
Paula Arantzazu Ruiz
