El Studio Ghibli podría tener sus días contados. Desde que su fundador Hayao Miyazaki se retirase el pasado 2013, varios rumores apuntaban al inminente cierre de la compañía de animación cinematográfica más importante de Japón, alegando problemas económicos. El pasado domingo, y afortunadamente sólo durante unas horas, estos rumores comenzaron a tomar forma en Internet, y varios medios de comunicación aseguraban que la empresa había echado el cierre definitivo, tras 29 años de andadura. Al parecer, esta información se originó como consecuencia de las declaraciones que hizo Toshio Suzuki, director general de la compañía, en un programa de la televisión japonesa, en las que anunciaba el cierre del Studio Ghibli.
Horas después, muchos fans de la compañía respiraban aliviados al conocer que el temible cierre será temporal. "Obviamente, la salida de Miyazaki fue bastante significativa. ¿Qué debería hacer Ghibli? En este momento, nos tomaremos un respiro para pensar en el futuro", ha dicho Suzuki. Al parecer, los directivos de la compañía se han visto obligados a tomar esta decisión como consecuencia de los problemas económicos originados por la subida del coste de la mano de obra en el país nipón y su negativa de externalizar la animación.
El Studio Ghibli abrió sus puertas en 1985, de la mano de Hayao Miyazaki y su socio y amigo Isao Takahata, después de ver el éxito de la primera película del realizador japonés, Nausica del valle del viento estrenada en 1984. Siempre fiel a la animación tradicional, y gracias a títulos como Mi vecino Totoro, La tumba de las luciérnagas y Porco Rosso, entre otros, poco a poco la compañía se convirtió en una de las más importantes en el mundo del cine. Su consagración llegaría en 1997 cuando su película La princesa Mononoke, que logró recaudar 10 millones de yenes en la taquilla, se alzó con el Oscar a la Mejor Película de Animación.
Fotograma de La princesa Mononoke
La última película del estudio estrenada en los cines de Japón es Omoide no Marnie, título que aún no tiene ni distribución ni fecha de lanzamiento fuera de las fronteras niponas. A España, el último largometraje animado firmado por el Studio Ghibli llegó el pasado mes de abril bajo el título El viento se levanta. Esperemos que este descanso de los animadores de la compañía sea sólo temporal y pronto veamos en las salas de cine nuevas obras maestras con el sello Ghibli.
