Los productores de la quinta entrega de Piratas del Caribe, Dead Men Tell No Tales, se enfrentan a un contratiempo que podría retrasar su rodaje en Australia. Cerca de 50.000 personas han firmado una petición online para que Walt Disney Pictures y Jerry Bruckheimer Films no usen animales reales en la película y, en su lugar, los creen con animación CGI.
La petición surgió después de que el equipo del filme pidiese al Gobierno que les permitiese introducir en Australia los dos monos capuchinos que aparecen en la saga, especie que está en la lista de animales prohibidos del país. Al parecer, las autoridades australianas han comenzado el papeleo para permitir la entrada de los monos. Rachel Hevesi, director del Santuario de Monos Salvajes de Cornwall, declara que están "tremendamente decepcionados después de que el gobierno australiano ignore lo perjudicial que es el uso de animales salvajes como actores. La animación CGI es tan buena que no es necesario explotar a los animales".
Algunos estudios han demostrado que los monos son separados de sus madres para entrenarles como actores cuando aún son muy pequeños y, una vez que han finalizado su carrera, no pueden regresar a su hábitat natural porque no están acostumbrados. Mientras tanto, el rodaje de Piratas del Caribe 5 continúa para llegar a su estreno, programado para el 2017.