Hace pocos días, el reparto original de Pretty Woman se reunió en el programa de televisión Today para rememorar juntos la cinta que les hizo famosos, en especial a una jovencísima Julia Roberts. En este encuentro, no han faltado los guiños, las bromas y las revelaciones. Uno de los descubrimientos más divertidos es el hecho de que la cinta originalmente no se pensase como una comedia romántica, ni como una comedia en sí misma, sino como un drama sobre el abuso de drogas.
Esa película tenía por título 3000 y acababa con la protagonista muerta por abuso de sustancias ilegales. Los planes cambiaron cuando Disney adquirió los derechos de la cinta y Garry Marshal tomó las riendas del proyecto. Lo primero que hizo el director fue contratar de nuevo a Roberts para el papel de la prostituta más querida del cine, y tras cambiar el guión y convertirlo en la historia de amor que conocemos hoy en día, comenzó a buscar a su galán, papel que tras mucho esfuerzo, y un tierno Post-It, fue a parar a manos de Richard Gere.
Por suerte, Marshall y Disney llegaron al proyecto y ayudaron a que Roberts ganase un Globo de Oro a mejor actriz, además de conseguir su segunda nominación al Oscar, galardón que obtuvo por Erin Brocovich diez años después.
