Aunque acaba de llegar a las salas de cine, la producción de Mad Max: Furia en la carretera ha recorrido un largo camino. George Miller ha tardado 17 años desde que tuvo la idea hasta su estreno y, en todo este tiempo, ha sufrido más de un imprevisto, incluso la muerte de uno de sus posibles protagonistas. En una entrevista con The Daily Beast, Miller habló sobre el hecho de que Heath Ledger estuvo a punto de convertirse en el nuevo Max Rockatansky.
"Cada vez que Heath venía a Sydney, llamaba y hablábamos sobre Max. Él tenía lo mismo que tienen Mel y Tom Hardy, esa masculinidad, carisma y energía inquieta, lo que necesitas para interpretar a un personaje relativamente calmado. El mundo perdió algo grande cuando se fue. Tom fue el siguiente en entrar por la puerta que tenía esas vibraciones".
Miller comenzó a negociar con Ledger para que interpretase a Max allá por 2006, pero su trágica muerte en 2008 hizo que tuviese que cambiar de planes. No sabemos cómo habría sido la versión de Heath Ledger, pero la nueva entrega de Mad Max ya ha recaudado más de 100 millones de dólares en los cines de todo el mundo.