Stanley Kubrick ya utilizó el truco de Nolan para llevar la ingravidez del espacio a su set de rodaje. La fuerza centrífuga de la plataforma en la que rodaron las escenas de la nave daba la sensación de que los actores estaban flotando en el espacio.
La magia del cine es aún mayor gracias al CGI pero estos directores se niegan a utilizarlo.