Jim Carrey iba a interpretar a Curly en la película de 2012 Los tres chiflados y se preparó para el papel, llegando a ganar 13 kilos de peso. Sin embargo, a mitad del proceso pensó que ya estaba mayor para sufrir cambios tan bruscos y decidió abandonar el proyecto.
¿Quién dijo que el mundo de la actuación era fácil?