No hay duda de que Jake Gyllenhaal pasó por un duro entrenamiento para meterse en la piel de Billy ‘The Great’ Hope en Southpaw. Después de ver un breve vídeo en el que aparecía el actor junto al director Antoine Fuqua preparándose en el gimnasio, Entertainent Weekly ha publicado unas declaraciones de Fuqua que nos hacen valorar (aún más) el trabajo de Gyllenhaal en el filme.
"Lo vi vomitar en el gimnasio y casi perder el conocimiento. Lo vi recibir golpes, disparos en las costillas, caerse. Recibió golpes y tenía inflamaciones de verdad. Miraba si iba a parar o a tirar la toalla, pero seguía adelante. Empujé a Jake hasta el borde y llegó conmigo". El director también explico que "no había ningún doble. Él rodo todas las escenas de boxeo".
Para conseguir ese físico, el actor forzó su límite al máximo. Ambos acudían al gimnasio dos veces al día, los siete días de la semana, durante seis meses. Entre los ejercicios que realizaban estaban correr 24km al día o hacer 2.000 flexiones.
Southpaw sigue la historia de Hope, un boxeador que es testigo del asesinato de su mujer (Rachel McAdams). A partir de este suceso todo irá cuesta abajo para el protagonista. Gyllenhaal estará acompañado por Forest Whitaker y Rita Ora, entre otros. La película llega se estrena en Estados Unidos el 24 de julio.