Jake Gyllenhaal no tiene problemas para encontrar buenos papeles en Hollywood. Hoy. Sin ir más lejos, es uno de los grandes favoritos al Oscar por su papel del boxeador Billy 'The Great' Hope en Southpaw. Sin embargo, hubo un momento, hace 20 años, en el que tenía dificultades para firmar contratos. No por falta de talento, sino porque sus padres -ambos en la industria- tenían la última palabra sobre lo que podía y no podía aceptar. ¿Sabías que el joven Gyllenhaal lloró al no poder protagonizar Somos los mejores de Disney?
Durante una aparición en el programa radiofónico de Howard Stern, Jake Gyllenhaal ha revelado cómo sus padres le prohibieron aparecer en Somos los mejores. En 1991, cuando tenía 11 años, hizo su debut en Cowboys de ciudad, después de conocer a Billy Crystal en una fiesta. Después, Gyllenhaal hizo una prueba para la película con Emilio Estevez sobre un equipo de hockey. Sus padres no estaban tan entusiasmados como él, y al final, como informa la revista Vanity Fair, no le dejaron convertirse en uno de los Patos. "Recuerdo que me puse a llorar en la encimera de la cocina. Pensaba: "Estáis locos". El papel que iba a protagonizar era el de Charlie Conway, que al final recayó en el actor Joshua Jackson (Dawson crece, Fringe).
"Mis padres me dijeron: "Estás a punto de empezar secundaria y eso es lo más importante. Nos odias ahora, pero nos lo agradecerás más adelante. Y ahora lo hago", concluye Gyllenhaal. Al final, sea como fuere, ha acabado siendo un gran actor. Si no, échale un vistazo al tráiler de Southpaw, de Antoine Fuqua.