Dentro de la dilatada carrera en el celuloide del gran actor ganador del Oscar (Wall Street) Michael Douglas (New Jersey, EE.UU, 1944) no había una película de superhéroes. Ahora le ha llegado el turno gracias a Ant-Man de Marvel, ya en cines, donde da vida al científico que inventa el traje que es capaz de convertir a un hombre corriente en este Hombre Hormiga con el poder de reducir a placer su tamaño al de estos insectos e incluso controlarlos. El hijo del mítico Kirk Douglas nos recibió en Los Ángeles para hablar de esta nueva experiencia.
¿Cómo reaccionaron sus hijos cuando se enteraron de que iba a participar en Ant-Man?
Mi hijo de 14 años reaccionó como lo haría un agente, y me dijo: "Sabes papá, esta oportunidad te puede abrir a toda una audiencia nueva". Así que le hice caso, ¡y aquí estoy!
¿Y qué tal fue la experiencia?
Fue una de las mejores de mi carrera, y una de la que nunca me olvidaré. Agradezco mucho la oportunidad.
¿Cuánto sabía acerca de Ant-Man antes de involucrarse en este proyecto?
Reconozco que no mucho, pero el productor Kevin Feige y Marvel fueron muy amables y me mandaron cerca de dos años de cómics de Ant-Man a mi casa mientras también leía el guión. Entonces fue cuando me puse al día de su historia y todo lo que hay detrás del personaje.
¿Qué elementos le gustaron del rol del científico Hank Pym?
Me atrajeron las posibilidades interpretativas que ofrecía el drama personal que sufre a raíz de la pérdida de su mujer y el distanciamiento con su bellísima hija Hope, interpretada en la película por Evangeline Lilly. Y aunque tampoco queríamos darle demasiadas vueltas a ese tema, no deja de ser un aspecto importante del personaje y de la historia que tendrá su desarrollo en el filme.
Y la película también tiene bastante humor con grandes momentos de Paul Rudd, Michael Peña y el resto del reparto, incluyéndole a usted.
Sí, y Michael Peña improvisó bastante. De hecho, no sé si llegó a leerse el guión…
¿Se ha quedado con el retrato suyo que aparece en el filme colgado en la pared?
No me cabía en casa, así que me tuve que comprar una nueva para colgarlo y ahora es lo único que tengo en ella (Risas).