Para ser Fantine, la prostituta con tuberculosis de Los Miserables, Anne Hathaway hizo una profunda investigación sobre la vida de las mujeres del siglo XIX en Francia. Además, perdió 11 kilos para meterse en el papel. Todo esto provocó que la actriz entrase en un estado casi de depresión: "Estaba tratando con una gran oscuridad [...] Necesitaba ir más allá de ese lugar negativo para interpretar a mi personaje".
Parece que a veces es difícil abandonar tu papel en una película...