El nuevo libro de Stephenie Meyer en el que reimagina Crepúsculo no sólo cambia de sexo a todos sus personajes (menos a los padres de Bella) también tiene un final distinto. La autora ha afirmado que para Life and Death: Twilight Reimagined ha tenido que ajustar algunas de las escenas del libro original, pero en el último capítulo la cosa se pone seria.
El mayor cambio ocurre cuando Beau (Bella en la edición original) es mordido por Joss. En la historia original, Bella es mordida por James pero Edward absorbe la ponzoña y la elimina de su cuerpo consiguiendo que sobreviva como humana. En Life and Death, la familia Cullen llega demasiado tarde para salvar a Beau. “Hay sólo dos posibilidades, Carine”, dice Archie (la versión masculina de Alice). “Él sobrevive como uno de nosotros o Edythe le mata intentado que no ocurra”.
Edythe (Edward en la historia original) le dice a Beau que puede elegir si quiere transformarse en un vampiro o morir como un humano normal. “Respetaré lo que quieras”, le dice. “Sé que es una elección horrible”. Beau decide convertirse en un vampiro para así poder estar con Edythe y formar parte de la familia Cullen como un nuevo miembro.
Por otro lado, el protagonista también conoce que la abuela de Jules (versión femenina de Jacob) es una mujer lobo. Además, en Life and Death no hay un triángulo amoroso entre los tres protagonistas como en la saga Crepúsculo. En cuanto al epílogo, Bonnie Black (la madre de Jules y versión femenina del padre de Jacob) Acude al funeral de Beau que han preparado los Cullen para fingir su muerte. Allí se encuentra con Beau y Edythe. La manda de lobos piensan que han roto el trato que tienen entre ambos clanes, pero Beau explica lo ocurrido y le pide a Jules que cuide de su padre, Charlie.
Pero, también hay malas noticias para los fans. Segñun THR, Meyer autora ha confirmado también que no tiene planes de continuar la saga en esta nueva versión de cambio de sexos y que tampoco cree que se lleve al cine. "Esto es el final de la historia de Beau y Edythe. Eres libre de imaginar el resto", concluye la autora.