Al parecer, Patinkin creía que se merecía mucho más que un simple papel en la serie Chicago Hope. En una ocasión declaró: "Comencé con gente como Milos Forman, Sidney Lumet, James Lapine, que eran personas increíblemente talentosas. Yo les decía: 'No me hables, no quiero tu opinión'. Me porté muy mal".
¡O eso dicen las malas lenguas!