Según publicó NYDailyNews en 2011, una fuente anónima aseguró que Jennifer Lopez se negaba a hablar directamente con sus compañeros durante el rodaje de Qué esperar cuando estás esperando. Si alguien tenía algo que decir a la actriz y cantante, tenían que hablar con su asistente en primer lugar. Al parecer, fue una respuesta a la avalancha de paparazzi que sufrió tras su separación con Mark Anthony.
¡O eso dicen las malas lenguas!