Mi gran noche de Alex de la Iglesia
Mientras que la Academia de las Artes prefiere decantarse por películas como La novia (ay), Nadie quiere la noche (argh), Un día perfecto (uy) o Truman (umm), lo cierto es que a nosotros preferimos celebrar la fiesta de fin año que nos propuso Alex de la Iglesia en la tremenda Mi gran noche. Un ritmo endiablado, desternillantes gags en cascada y un reparto que Luis García Berlanga habría aplaudido a rabiar. Así uno puede reírse a gusto y sin pudor en uno de los retratos más acertados de la España contemporánea que nos ha ofrecido el cine reciente. Digan lo que digan, de la Iglesia sigue siendo uno de los nuestros. (Alejandro G. Calvo)