Después de la polémica causada por la falta de diversidad racial en las nominaciones de los Premios Oscar, la Academia anunció una serie de medidas para cambiar el sistema desde su base. A su vez, dicha decisión también ha sido objeto de crítica, por lo que el presidente de la institución, Cheryl Boone Isaacs, ha explicado a The Hollywood Reporter el porqué de la nueva normativa.
“No podíamos quedarnos callados”, ha asegurado. “Y no teníamos ninguna razón para guardar silencio. No es algo inteligente quedarse sentado y dejar que la conversación fluya cuando te incumbe. En algún punto, tienes que levantar la voz”, ha sentenciado.
Por su parte, el director ejecutivo de la Academia ha negado que se trate de ser “políticamente correcto”. “Somos los mejores dentro de lo mejor de la industria cinematográfica. Se trata de construir el mejor equipo y la mejor institución, porque debemos tener el mejor reflejo de la cultura”, ha explicado.
Parece que poco a poco el ambiente con respecto a la igualdad se ha relajado, aunque Chris Rock reavivará la llama bromeando sobre el tema durante la gala de entrega de las estatuillas, que se celebra el próximo 28 de febrero.