Casi seis años después del final de Los hombres de Paco, Michelle Jenner y Hugo Silva vuelven a coincidir como pareja de ficción con la comedia Tenemos que hablar, dirigida por David Serrano. Con la crisis económica como telón de fondo, la película nos cuenta la historia de Jorge, un empleado de banca que ha llevado a sus suegros a la ruina con sus malos consejos y que ha terminado perdiendo a su mujer, Nuria. Ahora, ella quiere casarse con su nueva pareja, pero él sólo quiere volver a su lado.
Durante la promoción de la película en Madrid, pudimos hablar con los actores y aprovechamos para preguntarles por su regreso como pareja en pantalla, las mentiras piadosas y alguna curiosidad del rodaje.
¿Cómo es protagonizar una película sobre la crisis e interpretar a un personaje que mucha gente odia?
Hugo Silva: Ese es el marco inicial de la película. Es una comedia y ya desde el principio comenzamos a reirnos de como éramos todos en España, de esa España que iba como un cohete hace muy poquito tiempo y que al final no era verdad. Vemos cómo los personajes se van metiendo en los peores negocios en los que se podían meter pero con toda la ilusión del mundo. Mi personaje es un empleado de banca que propone todos estos proyectos pero con toda su buena intención porque lo que quiere es ayudar a su familia política, pero resulta que él es el primer engañado.
¿Os hubiese gustado meter un poco más de caña a algunos personajes?
Hugo: No porque no es una película social, es una comedia de enredo.
Michelle Jenner: Es una comedia romántica, la crisis es el contexto para entender dónde arrancan estos personajes y por qué están donde están en este momento.
Hugo: Creo que es mucho más inteligente reirnos de nosotros mismos que empezar a señalar. En esta película lo que hacemos es reirnos de nosotros, de ese espíritu que había hace 10 años.
La película está llena de mentiras piadosas, ¿creéis que son necesarias en algunas situaciones?
Michelle: La verdad es la verdad y yo creo que no hay nada mejor que eso, pero, a veces, por no hacer daño intentas suavizar algo o porque no te atreves, no sabes cómo decirlo y lo vas alargando, pero, desde luego, al final es peor y en esta película se demuestra.
Hugo: Todo el tema de la mentira y esquivar situaciones va a favor de la comedia y del enredo. El personaje de Michelle, Nuria, que es el motor de la película, dice esa frase tan brutal y tan lapidaria que es "Tenemos que hablar" y luego, como es una frase tan mala se acojona y empieza a dar rodeos. Eso es lo que da lugar a las mentiras, pero en una comedia no se hace lo que se suele hacer, precisamente para dar pie a la comedia.
¿Cómo fue rodar esa escena tan divertida de la cena en un restaurante colombiano, en la que Nuria explota con todo el mundo?
Michelle: Para mí es la más divertida, yo me lo pasé muy bien.
Hugo: El restaurante está en Usera y es tal cual aparece en la película. El público puede ir a ese restaurante, lo aconsejamos, y, aunque hay una supervisión del equipo artístico de la película, la decoración no se ha tocado. Nos lo pasamos muy bien.
Michelle: A mi me encantó y eso que en la película no aparece la secuencia entera, en la realidad es un poco más larga, pero se tuvo que acortar en el montaje por el ritmo. Pero, ya te digo, lo disfruté mucho.
Hugo: Estaba emocionada con esa secuencia (risas)
¿Ha habido alguna parte de la película que os haya costado más rodar?
Hugo: Ha ido todo muy bien, sobre todo porque en los ensayos se ha probado, hemos jugado con el diálogo, el guion se ha reescrito... O sea, era un laboratorio continuo. Cuando llegamos al rodaje ya estaba todo pactado, estábamos todos muy cómodos con los personajes.
Michelle: Lo único malo es el calor que hemos pasado, ya que nos pilló esa tremenda ola de calor que hubo. Había momentos que era un infierno. La secuencia del banco que aparece al principio de la película la rodamos sin aire acondicionado. Imagínate, 40 personas metidas en una habitación pequeña, con los focos... Había momentos de abanico y al borde del desmayo.
Para muchos fans de Los hombres de Paco, este es el reencuentro de Lucas y Sara, ¿qué pensásteis cuándo supisteis que ibais a trabajar juntos?
Michelle: Estuvimos encantados. Habíamos vuelto a coincidir en algun pequeño proyecto pero nada de este estilo y yo tenía muchas ganas. Nos conocemos mucho, nos entendemos perfectamente cuando trabajamos juntos y es todo muy fácil y muy cómodo.
¿Creéis que Lucas y Sara habrían acabado así?
Michelle: ¡Vete a saber, nunca se sabe!
Hugo: ¡A saber! Hombre, está claro que son dos personajes distintos, con géneros distintos, códigos distintos... Pero nunca se sabe. Eso es mejor dejarlo en el imaginario de la gente.
Michelle: ¡Claro!
La comedia española está viviendo una época muy buena, ¿vosotros como lo vivís desde dentro?
Hugo: Ha habido comedias que han tenido datos brutales, pero está pasando con la ficción en general, incluso en televisión. Ahora mismo el público está muy cerca de nuestra ficción y eso es una maravilla, pero el público no sabe la cantidad de proyectos que se quedan por el camino.
Michelle: Proyectos que no llegan a salir.
Hugo: Pero vamos en muy, muy buen camino, que siga así...